Dos "tesoros" de 1827 han vuelto, de una manera un tanto peculiar, al lugar en el que siempre debieron estar: el Archivo Municipal. Los documentos, titulados “Declaración de producción al Ayuntamiento de Ciempozuelos, Hacienda, J. Leandro López” y "Expediente de Arrendamiento de Bienes: Subasta de cinco artículos, vino, vinagre, aceite, jabón y carne, Ayuntamiento de Ciempozuelos” se encontraban a la venta en una página web; cuando la Subdirección General de Archivos y Gestión Documental tuvo conocimiento del hecho, informó el pasado mes de agosto a la Brigada de Patrimonio Histórico y, a partir de ese momento, la Policía Judicial consiguió recuperar los archivos.
Dichos legajos “ofrecen una información muy valiosa sobre la historia del municipio de Ciempozuelos”, ha asegurado la archivera municipal, Elvira Rodríguez, durante la presentación de la citadas reliquias a los vecinos en el acto celebrado en la Biblioteca Municipal Almudena Grandes, en el que también explicó otro tipo de curiosidades, como que la línea torcida en uno de ellos “demostraba que el escritor estaba muy contento ese día”.
¿Cómo terminaron vendiéndose en Internet?
Rodríguez sostiene que "en esa época no había archivo, y la guardia y custodia de los documentos se hacía en el Ayuntamiento, normalmente en un baúl. Había tres personas con tres llaves, y cuando tenían que coger un documento iban las tres para abrir el baúl. En algún momento alguien de buena fe se los llevó a casa para protegerlos y acabaron olvidados y en manos de los predecesores que no les han dado el valor que tienen”.
Nos permite tener un testimonio de cómo era el funcionamiento del Ayuntamiento
Con respecto a la hacienda de J. Leandro López, Elvira Rodríguez aseguró que se encontraba en plena investigación para conocer quién era este vecino, mientras que el documento de la subasta “nos permite tener un testimonio de cómo era el funcionamiento del Ayuntamiento”, ya que “Ciempozuelos era una villa pequeña que contaba con pocos comercios, que sobrevivía con el trueque entre los vecinos y la subasta de bienes. Las haciendas que había alrededor daban su excedente de producción al Ayuntamiento para el pago de tributos, y éste realizaba subastas periódicamente”.
Además de los documentos, en el acto, presidido por Raquel Jimeno, alcaldesa del municipio, se habló de la importancia que tiene el archivo municipal y de la labor que se está haciendo desde hace más de un año para su conservación. La archivera hizo un llamamiento a los vecinos para que revisen en casa y busquen documentos, tanto documentales como gráficos, y los ofrezcan para ser estudiados por el Archivo Municipal.