El Ayuntamiento de Collado Villalba puso a disposición a más de 200 personas con la activación del Plan de Actuación Municipal ante Inundaciones (PAMINUN), la primera vez que se ha puesto en marcha en el municipio.
Personal de la Brigada de Obras, Mantenimiento Parques y Jardines, Limpieza Viaria, Policía Local, Protección Civil, Guardia Civil y Bomberos estuvieron coordinados durante el transcurso de la activación del Plan, en las distintas reuniones del CECOPAL (Centro de Coordinación Operativa Local) que se mantuvieron a lo largo de las pasadas semanas, como consecuencia de las intensas y prolongadas lluvias caídas en la Región: unos 320 litros por metro cuadrado se registraron en Collado Villalba desde el pasado 1 de marzo, el mayor episodio de lluvias en los últimos 135 años en la Comunidad de Madrid, tras encadenar el paso de 4 borrascas.
La dirección del Plan correspondió a la alcaldesa, Mariola Vargas, que estuvo en contacto diario con el Puesto de Mando Avanzado de la Comunidad de Madrid y realizó la toma de las principales medidas a llevar a cabo.
Balance
Esta mañana la alcaldesa Mariola Vargas, ha presentado el balance de este Plan Municipal, en un acto que ha contado con los concejales de Seguridad Ciudadana, Yolanda Martínez; Urbanismo, Adan Martínez, y Obras, Ramón Pavón. También han estado presentes el comandante del Puesto de la Guardia Civil, Antonio Montoro; el jefe del Parque de Bomberos de la localidad, Fernando Pascual; los miembros de la Policía Local, el subinspector José Andrés Santos y el oficial Roberto Vizuete, y el jefe de Protección Civil, Diego Herrera.
Máxima alerta
Mariola Vargas ha trasladado el agradecimiento a todas las personas involucradas en este dispositivo que “han estado en máxima alerta durante estas jornadas, adelantándose con su actuación a las situaciones de riesgo que se pudieron dar, mediante la evaluación de la situación y análisis de las previsiones, ejecutando medidas preventivas, que han permitido evitar daños personales y minimizar al máximo los daños materiales”.
Desbordamiento del Río Guadarrama a su paso por Romacalderas
El Río Guadarrama alcanzó varios días el umbral rojo o de desbordamiento a su paso por la estación de aforamiento de Collado Villalba, afectando principalmente al parque de Romacalderas, inundando sus praderas y algunos caminos. No obstante, el peor día se dio el sábado 8 de marzo, cuando estaban vigentes cuatro avisos amarillos por lluvia, acumulados de precipitación, vientos y nieve.
Además, se produjeron nevadas en cotas bajas, una de ellas dentro del propio término municipal, lo que aumentó considerablemente el aporte de agua a los cauces. Todas estas situaciones elevaron los volúmenes de los pantanos, siendo necesarios desembalses por seguridad hídrica.
La suma de estas circunstancias contribuyó al excepcional caudal de agua que transportaba el Río Guadarrama y afluentes, que causó varios desbordamientos en la zona de Romacalderas, aunque sin daños destacables. El agua llegó a entrar a algunos jardines, además de invadir el Paseo del Río y alcanzar el tablero del puente del Molino, que da acceso a la calle Escofina en el polígono P-29
La Policía Local tuvo que cortar el acceso al puente por prevención a que el agua pudiera superar la estructura, situación que no se llegó a dar.
Disposición de plazas hoteleras
Esa misma noche del 8 de marzo un matrimonio residente de la zona decidió ser voluntariamente desalojado por su seguridad, utilizando las plazas hoteleras que el Ayuntamiento tiene concertadas para estas situaciones, pudiendo volver a su domicilio al día siguiente.
No fue necesario el montaje de un albergue provisional previsto en el pabellón del colegio Rosa Chacel, aunque todos los recursos estaban listos para su instalación si se hubiera requerido. Todas las medidas se fueron tomando de manera operativa, intentando que fueran adecuadas a la situación de cada momento, teniendo en cuenta la evolución prevista y tratando de reducir al máximo las consecuencias a la ciudadanía, pero siempre priorizando la seguridad de las personas. Resaltar la responsabilidad de la gran mayoría de los ciudadanos que siguieron las recomendaciones de alejarse de los cauces, facilitando la labor de los servicios de emergencia.
Se ha mantenido un constante seguimiento de todos los parámetros por parte del Centro de Coordinación Operativa Local durante todo el tiempo que han durado las lluvias y en la actualidad se sigue vigilando la evolución del cauce.