El equipo de Gobierno de Collado Villalba, liderado por el Partido Popular, ha presentado en sesión plenaria la Cuenta General de 2022, así como el reconocimiento de deuda a diferentes proveedores, en su mayoría pequeños y medianos empresarios.
Según han asegurado, el Consistorio villalbino ha cerrado 2022 con un presupuesto favorable de 5.159.430,38 €. En el apartado de ingresos, los derechos reconocidos netos ascendieron a la cifra de 55.128.820,09 € y los pagos realizados por el Ayuntamiento en el mismo ejercicio fueron de 50.980.357,97 €.
La alcaldesa Mariola Vargas ha recalcado el “formidable compromiso contributivo de todos los vecinos del municipio, con un porcentaje de recaudación del 92%, que ha permitido presentar unas cuentas saneadas, fruto de una gestión seria y responsable, y todo ello pese a la situación heredada de la anterior etapa socialista y las limitaciones presupuestarias a que nos vemos sometidos por el Plan de Ajuste”.
2022 se cierra con un presupuesto favorable de 5 millones de €, que permitirá más inversiones para los vecinos
En lo referente al reconocimiento de deuda - facturas que no se abonaron por diferentes motivos en el ejercicio correspondiente - se ha aprobado el pago por un importe de 476.071,81€, un total de 295 facturas, con el voto favorable del PP, la abstención de PSOE, MCV Corazón Villalbino y Mas Madrid, y el voto en contra de VOX.
El concejal de Hacienda, Miguel Aisa, ha aclarado que estas facturas corresponden a servicios y trabajos prestados y reconocidos, presentadas en su mayoría fuera de plazo, y que pertenecen en gran parte a pequeños y medianos empresarios. Estas facturas suponen solamente un 3% de las 9.000 que se tramitan de media por el Ayuntamiento de Collado Villalba, lo que significa un 1% respecto a los 50 millones de euros que fueron abonados el pasado ejercicio.
“Es compromiso de este equipo de Gobierno cumplir fielmente con las obligaciones adquiridas, y reducir cada año la cifra de reconocimiento de deuda, a fin de evitar lo que ocurría durante los gobiernos socialistas, donde los proveedores podían pasar años sin que se les abonaran sus servicios”, ha asegurado Miguel Aisa.