El Ministerio de Justicia ha denegado los refuerzos que el Ilustre Colegio de Abogados (ICAM) había solicitado para cubrir los profesionales del sector. Según los letrados, esta decisión "llevará al colapso de la justicia en Madrid", ampliando los plazos de los procedimientos judiciales de manera alarmante.
Desde el ICAM han lanzado un comunicado advirtiendo de la situación y explicando que, al parecer, la Dirección General para el Servicio Público de Justicia del Departamento de Pilar Llop ha rechazado 8 de las 28 solicitudes presentadas el pasado mes de abril "por razones de disponibilidad presupuestaria". Una respuesta que ha sembrado la alarma en el sector.
“Que desaparezcan los refuerzos que mayoritariamente tenían los juzgados, en el caso de Madrid, nos conduce a una situación de auténtico colapso en la Audiencia Provincial, especialmente en Familia y Condiciones Generales de la Contratación. Tras la acumulación de procedimientos por la pandemia, y meses de parálisis a causa de los conflictos laborales en cadena, esta decisión es un desastre: nos conduce a una situación de auténtico colapso en Madrid. Esto puede ser la puntilla para muchos despachos en una situación ya difícil de sostener”, denuncia Eugenio Ribón, Decano de la abogacía madrileña.
Nos encontramos con que no solo no se han asignado estos refuerzos que venimos reclamando para recuperar la normalidad en la Administración de Justicia, sino que, al contrario, se suprimen
En este sentido, desde el Colegio advierten que, debido a esta falta de recursos, algunos procedimientos podrían alargarse de uno a tres años. Además, juzgados especializados en Familia o Violencia sobre la Mujer también han visto mermadas sus plantillas.
Ya el pasado mes de marzo, tras el fin de la huelga de los Letrados y Letradas de la Administración de Justicia (LAJ) que se saldó con un 35% de suspensiones, el ICAM reclamó “medios extraordinarios para reactivar la Justicia”. Para el decano de la abogacía madrileña, la salida a esta crisis pasaba por “la dotación de mayores recursos humanos, mejores medios materiales y, sobre todo, una altura de miras capaz de responder a las legítimas demandas de los ciudadanos sin intereses partidistas ni planes a corto plazo”.
Ahora, "nos encontramos con que no solo no se han asignado estos refuerzos que venimos reclamando para recuperar la normalidad en la Administración de Justicia, sino que, al contrario, se suprimen", asegura el decano.