La Fiscalía de Madrid pide diez años de prisión para un sargento de la Guardia Civil destinado en el Negociado de Tramitación de Expedientes de Compras del Servicio de Telecomunicaciones por la presunta comisión de delitos continuados de falsedad de documento mercantil y malversación de caudales públicos.
El juicio se celebrará en la Audiencia de Madrid con un jurado popular. También, solicita 9 años de prisión para un trabajador autónomo que, según el Ministerio Público, junto al otro acusado urdió un plan que logró desviar un total de 210.721,41 euros a dos cuentas corrientes titularidad del trabajador autónomo para después repartirse el dinero entre ambos.
El acusado empleaba la denominación "Suministros Logísticos Dorado" para elaborar documentos "que simulaban ser facturas a cuenta del suministro de materiales o bien de la realización de reparaciones a favor de la Guardia Civil".
Los acusados sacaban cantidades en efectivo de entre 2.000 y 5.000 euros
El Ministerio Público subraya que dichas facturas "no respondían a suministros ni reparaciones", pero que una vez recibidas en el negociado del trabajador autónomo "daban lugar a que se ordenara el pago mediante transferencia bancaria a favor del emisor".
Además, los acusados "se cuidaron" de que los suministros y reparaciones nunca superasen los 5.000 euros porque de esta manera el sargento de la Guardia Civil podía pagar los supuestos servicios a través del sistema de "pago mediante anticipo de caja fija", ya que los que superaban ese importe "estaban sujetos a mayores controles".
En total, el trabajador autónomo elaboró 43 facturas. Una vez transferidos los fondos del instituto armado, se depositaban en dos cuentas desde las que sacaba cantidades en efectivo de entre 2.000 y 5.000 euros que, posteriormente, entregaba al sargento.