Agentes de la Policía Nacional han desarticulado un grupo criminal formado por cinco conocidos aluniceros, estando dos de ellos implicados en la tentativa de homicidio ocurrido el pasado mes de abril en una peluquería del distrito de Villaverde. Cometían los robos con vehículos sustraídos actuando por toda la geografía española. Se han practicado dos entradas y registros donde se ha intervenido ropa utilizada en los asaltos y un cartucho idéntico al utilizado en la tentativa de homicidio.
La investigación se inició a principios de enero tras dos robos cometidos por el método del alunizaje en centros comerciales de Madrid utilizando vehículos sustraídos de alta gama. En el transcurso de las averiguaciones, comprobaron que se trataba de un grupo criminal especializado en robos en establecimientos y vehículos de gran cilindrada.
Asalto a una peluquería por celos
Paralelamente en el mes de abril, se abrió otra investigación a raíz de que dos individuos a bordo de un coche robado, asaltaran una peluquería en el madrileño distrito de Villaverde y dispararan en la pierna a un cliente mientras se cortaba el pelo. Las averiguaciones de los agentes constataron que el móvil del asalto fue un ajuste de cuentas motivado por razones sentimentales.
Comprobaciones posteriores permitieron a los agentes detectar que el autor del disparo y su acompañante formaban parte del grupo criminal de aluniceros que estaba siendo investigado por robos en comercios de varios puntos de España.
Trató de darse a la fuga provocando lesiones a varios agentes
Utilizaban altas medidas de seguridad para evitar ser localizados
El grupo estaba formado por cinco jóvenes de entre 24 y 33 años todos ellos altamente especializados en esta metodología delictiva. Sustraían vehículos de gran potencia a los que cambiaban sus placas de matrícula por otras duplicadas de vehículos de la misma marca y modelo para dificultar así la investigación o para venderlos en el mercado ilegal. Una vez cometían los robos volvían a instalar las placas originales logrando así que su identificación fuese muy laboriosa.
Adoptaban numerosas medidas de seguridad como ocultar el rostro, utilizar guantes o no pernoctar más de dos noches en la misma vivienda, siendo casi todos los domicilios pisos ocupados.
A finales del mes de mayo los agentes localizaron y detuvieron a los cinco los integrantes del grupo. El arresto de uno de ellos y líder de la banda, se produjo cuando conducía un vehículo de gran potencia, el cual utilizó para acometer en varias ocasiones contra los vehículos policiales provocándoles numerosos daños. Después de intentar abrirse paso y darse a la fuga, fue detenido causando lesiones a varios agentes.
Los investigadores comprobaron que estaban implicados en 73 hechos delictivos siendo éstos pertenencia a organización criminal, robos de vehículos, falsificación de documentos, daños, atentado a agente de la autoridad, sustracción de placas de matrícula, hurto, estafa y delito contra la seguridad vial. Actuaban no solo en la Comunidad de Madrid sino también en el resto de la geografía española, principalmente en Cáceres y Toledo.
En los dos registros realizados intervinieron prendas de ropa utilizada en los robos y un cartucho de idénticas características al empleado en la tentativa de homicidio. También lograron intervenir casi la totalidad de los vehículos sustraídos ascendiendo a un total de 35.