A veces, la acción ciudadana consigue un cambio inesperado en la forma de hacer las cosas, o por lo menos una concienciación social para que estas vayan cambiando poco a poco. Así lo demuestra la campaña iniciada por un jubilado valenciano de 78 años que, a través de la plataforma Change.org, iniciaba una petición para que los bancos volviesen a dar atención presencial en las sucursales y así ayudar a las personas mayores con sus trámites. Una solicitud que ya cuenta con más de 330.000 firmas y que, después de hacerse viral, ha hecho que el Gobierno llame a consulta a los bancos para asegurar la "inclusión financiera de los mayores".
En el día de ayer, la vicepresidenta Nadia Calviño se reunió con el presente de la Asociación Española de Banca (AEB), José María Roldán, el director general de la CECA, José María Méndez, la secretaria general de la Unión Nacional de Cooperativas de Crédito (UNACC), Cristina Freijanes, y el director de Conducta de entidades del Banco de España, Fernando Tejada, para abordar "urgentemente" la inclusión financiera de toda la sociedad, incluyendo a nuestros mayores.
Durante el encuentro se ha acordado crear un Observatorio para la inclusión financiera en el que se realizará un diagnóstico de la situación y en el plazo de un mes, las patronales bancarias tendrán que revisar su Protocolo estratégico para Reforzar el Compromiso Social y Sostenible de la Banca, plateando nuevas soluciones para garantizar que toda la población española, independientemente de su edad, pues acceder a los servicios financieros.
Se ha acordado crear un Observatorio para la inclusión financiera en el que se realizará un diagnóstico de la situación
"He llegado a sentirme humillado al pedir ayuda en un banco"
Una reunión y unas medidas que nunca se habrían tomado si no hubiese sido por la petición que inició Carlos San Juan De Laorden, un jubilado valenciano de 78 años, en la que solicitaba a los bancos una "atención más humana" en vez de tantos trámites por internet, pues él mismo confesaba haberse sentido "humillado" cuando había pedido ayuda para poder realizar algún trámite online.
"Yo he llegado a sentirme humillado al pedir ayuda en un banco y que me hablaran como si fuera idiota por no saber completar una operación. Y he visto ese mal trato dirigido a otras personas. Duele mucho sentirse así. Las personas mayores existimos, somos muchas y queremos que nos traten con dignidad. Solo estamos pidiendo que se habiliten secciones en las sucursales en las que dejen de excluirnos".