Otro deportista más mintiendo sobre su sexualidad para cumplir su sueño, esto es una realidad que existe, y muchos quieren ocultar, y el mensaje que ha transmitido el futbolista del Adelaide United, Joshua Cavallo, después de reconocer que es gay.
La homosexualidad y el deporte, concretamente el fútbol, son dos mundos “incompatibles” por el miedo que los propios profesionales pueden tener a poder perder su trabajo o incluso recibir una opresión, ya sea por parte de los compañeros, jefes o por parte de sus propios seguidores. Si hacemos una mirada hacia atrás no conocemos muchos futbolistas que hayan dado a conocer su condición sexual, es más Thomas Hitzlsperger se sinceró después de terminar completamente con su carrera deportiva.
“Yo siempre sentía la necesidad de esconderme porque estaba avergonzado. Avergonzado nunca habría sido capaz de hacer lo que amo y ser gay. Esconder lo que realmente soy para perseguir un sueño que siempre he querido desde pequeño: jugar al fútbol y ser tratado igual que el resto nunca se sintió como una realidad”, explicaba Cavallo. Escuchar estas palabras por parte del futbolista me hace darme cuenta de que esto es una realidad. Un futbolista nos está explicando desde su propia experiencia que si el hubiera dicho antes su orientación sexual no habría podido seguir su sueño. La cuestión es ¿A qué precio una persona tiene que dejar de ser como es para poder cumplir sus objetivos?
¿“Un futbolista profesional” solamente puede ser heterosexual?
Me cuesta pensar cuáles son las verdaderas razones por las que sigue existiendo homofobia dentro de este mundo. ¿Miedo a que se les tache de débiles? Por desgracia siempre se nos ha conocido a las personas homosexuales como débiles por, como siempre han dicho, “somos muy afeminados” pero dejarme recalcar, una vez más, que los estereotipos que implanta la sociedad no son la realidad.
¿Miedo a ser el objetivo fácil de las hinchadas? Los futbolistas homosexuales pueden tener miedo a que los hinchas se estén metiendo continuamente con ellos y dañar la imagen del equipo o, lo que es peor, dañar su imagen.
¿Miedo a las amenazas? Este tema es un poco más complicado porque nos metemos en otros temas, pero la cuestión es que muchos de los hinchas se han declarado abiertamente neonazis por lo que podrían lanzar múltiples amenazas contra estas personas por simplemente odio y no joder solamente su carrear profesional sino personal por un miedo constante que pueden llegar a tener.
Pero la realidad puede ser completamente otra. Al final lo único que tenemos claro es que los futbolistas homosexuales tienen miedo a que los demás lo sepan. “Yo he tenido que aprender a digerir mis sentimientos para encajar en el molde de un futbolista profesional. Crecer siendo gay y jugar al fútbol son dos mundos que no se habían cruzado antes. Yo he vivido asumiendo que esto era un tópico del que nunca se había hablado”, destaca Cavallo en el vídeo que ha lanzado.
De esta última declaración me hace reflexionar sobres si solamente los hombres heterosexuales son las únicas personas que saben darle a un balón para que ruede por un campo de fútbol y conseguir entrar en una canasta. ¿“Un futbolista profesional” solamente puede ser heterosexual?
Hacen falta cambios en muchos aspectos de la homofobia, pero el deporte es una de las más importantes, sobre todo en los personajes públicos que al final son los que acaban dando visibilidad.