El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid ha declarado Bien de Interés Cultural (BIC) la pintura El Apóstol Santiago y sus discípulos adorando a la Virgen del Pilar, atribuible a Francisco de Goya y Lucientes. De este modo, el Ejecutivo regional ha reconocido el valor histórico y artístico que supone esta obra para el patrimonio cultural, dotándola del mayor grado de protección, teniendo en cuenta la relevancia del autor, los escasos ejemplos hoy conocidos de su producción religiosa y la gran calidad del cuadro.
Se trata de un óleo sobre lienzo de tamaño 107x80 centímetros datado en el decenio comprendido entre 1772 y 1782 y en buen estado de conservación, en el que destaca la viveza de los colores y el agrupamiento y postura de las figuras, características de Goya (Fuendetodos, Zaragoza, 1746-Burdeos, Francia, 1828).
La gran devoción que el pintor profesaba a la Virgen del Pilar se evidencia en las sucesivas versiones que consagró a la iconografía de su Aparición en las dos décadas que abarcan desde 1762, cuando pintó el tema por vez primera en el armario de las reliquias de la iglesia de Fuendetodos, hasta 1782, en que firma el retablo de la Urrea de Gaén.
La obra ha adquirido el mayor grado de protección teniendo en cuenta la relevancia del autor, los escasos ejemplos hoy conocidos de su producción religiosa y la gran calidad del cuadro
El lienzo declarado BIC, procedente de la colección Rosillo, supone una versión intermedia entre la representación aislada de la Virgen del Pilar que se conserva en el Museo de Zaragoza y versiones posteriores como la de la colección Pascual de Quinto.
Destaca sobre las otras versiones acometidas por Goya en la década de 1770 por su fuerza expresiva, superación del tamaño reducido de sus primeras obras devocionales, contención y sincretismo compositivo, además de por sus vivos colores y marcados contrastes lumínicos.