La hostelería madrileña preveía facturar 16.395 millones de euros este año 2022, y estaba recuperando la facturación hasta llegar a un 93% de lo facturado en 2019. En este momento, la facturación es de un 7 % menos que la de antes de la pandemia.
Las medidas adoptadas por el Gobierno de España, que entran en vigor hoy 10 de agosto y en concreto la limitación a 25ºC de la temperatura mínima en los locales, supondrá una reducción de al menos un 3% de la facturación de los establecimientos, 1.347.608 € diarios, por la caída de clientes en los establecimientos. Descenso que se prevé continúe hasta finales de septiembre y afectará en mayor medida al consumo de personas mayores de 45 años. En este periodo, del 10 de agosto al 30 de septiembre, la hostelería madrileña sufrirá una pérdida de facturación de 70 millones de €. A ello, habría que añadir la pérdida de atractivo de Madrid en el ámbito turístico, que supondrá un impacto añadido de un 2 % de caída de facturación, 898.405 € diarios, que supone perder otros 46 millones de €. En total, en los próximos dos meses, las medidas del Gobierno supondrán un impacto negativo de 116 millones euros para la hostelería madrileña en la ciudad de Madrid.
Esta situación de pérdida de facturación continuará este otoño ante un escenario de descenso de la facturación por la pérdida de renta disponible para las familias, por efecto de la inflación y la subida del coste de las materias primas, y de las que el gasto en ocio y restauración es uno de los primeros gastos que ajustan los ciudadanos.
La previsión de la Hostelería de Madrid para este invierno tampoco es positiva y a este frenazo en el consumo, se unirá el impacto negativo de las medidas energéticas del Gobierno. Hostelería Madrid estima que durante los meses de diciembre a febrero 2023, la limitación a 19ºC de la temperatura máxima ambiental en los locales y la pérdida de atractivo de Madrid, por el apagado de los escaparates, especialmente a la campaña de navidad, supondrá una pérdida diaria de un 5 % de la facturación de la restauración madrileña, 2.246.013 € diarios, llegando a los 202 millones de euros de pérdida durante los tres meses de invierno.
Previsión que, según la Hostelería de Madrid, también habría que mantener para los meses de julio a septiembre de 2023, en los que se mantendrían las limitaciones de la temperatura mínima en los locales en 25 ºC y en la que durante el próximo verano se producirá una caída equivalente de facturación, 202 millones de euros.
Demandan marcos sancionadores que se ajusten a la realidad de las pymes
En total, desde Hostelería Madrid estiman que el impacto en la cuenta de los establecimientos para la hostelería madrileños será 520 millones de euros por el descenso del consumo que producirán las medidas de ahorro energético.
"En el plano del empleo, teniendo en cuenta que únicamente una cuarta parte de ese descenso de facturación de 520 millones de euros repercutiera en pérdida de empleo, estimamos que las medidas de ahorro energético del Gobierno de España supondrá la perdida de 6.000 empleos en la Comunidad de Madrid", aseguran desde la Hostelería madrileña.
Desde Hostelería Madrid quieren destacar el esfuerzo en ahorro energético que viene haciendo las empresas de hostelería madrileñas, a través de la mejora de la iluminación y de la adquisición de maquinaria más eficiente, y la reducción del consumo que se está consiguiendo mediante las políticas de ahorro para la reducción de las facturas eléctricas.
En este contexto, demandan medidas fiscales y financieras que palíen esta situación, como puede ser el establecimiento de un periodo de carencia de los ICO o la reducción de la carga impositiva de las empresas, especialmente de la pymes.
Asimismo, demandan marcos sancionadores que se ajusten a la realidad de las pymes. "Nos parece una gran error y una pérdida de oportunidad que habiendo tenido el instrumento legal del Real Decreto Ley, este Gobierno, en lugar de remitirse a la Ley de industria de 1992, no haya aprovechado la oportunidad para desarrollar un marco sancionador ponderado y que evite el riesgo de sanciones de millones de euros que pueden poner en peligro su viabilidad", continúan diciendo.
Finalmente, desde la Hostelería quieren invitar al Gobierno de España a que establezca mecanismos para medir objetivamente el esfuerzo energético que se plantea a las pymes y pondere las medidas restrictivas de la temperatura en los locales, para que tengan el menor impacto en el empleo y no pongan en peligro la viabilidad de las pymes. Es más, consideran imprescindible que estas medidas se consensúen con las Comunidades Autónomas y los sectores económicos, evitando la improvisación y estableciendo unos objetivos compartidos en los próximos meses que ajusten las medidas a la necesidad real de ahorro necesario en cada momento.