El pasado sábado fallecía en la UCI del Hospital La Paz la joven de 34 años Silvia Idalia Serrano tras someterse a un total de tres operaciones estéticas en la misma intervención el pasado 29 de abril (reducción de mamas, liposucción y transferencia de grasa a los glúteos).
Estas operaciones fueron realizadas en una de las clínicas de los centros CEME, en Madrid. A pesar de que la víctima tenía fuertes dolores, fue dada de alta el día posterior a la intervención, ya que desde CEME apuntaban que eran "normales". No obstante, la mujer ingresaba el pasado 6 de mayo en La Paz y tuvo que ser inducida a un coma que ha durado casi 3 meses y ha tenido el más trágico final.
Ahora, la abogada de Silvia ha apuntado que se va a solicita una autopsia por un médico forense para esclarecer cuáles han sido las causas de su muerte y si entre ellas se encuentra "el estado que la llevó a ingresar" a principios de mayo. La familia ha sido quien ha denunciado lo ocurrido señalando una posible negligencia al no tratar los dolores que su hija manifestaba en el postoperatorio.
Las bacterias implicadas en la fascitis necrotizante sufrida por la paciente no son de adquisición hospitalaria ni transmitidas a partir de personal o el entorno sanitario, sino procedentes de la microbiota (flora) de la paciente
Si bien la clínica lamenta lo sucedido, se defienden alegando que "ha sido algo fortuito, una desgracia". Así, declaran que no se ha producido incumplimiento alguno de la 'lex artis' en cuanto a los niveles de calidad que se les exige a los profesionales en este tipo de intervenciones.
Se ha entregado en el juzgado un informe pericial que descarta la 'mala praxis' en la triple operación a finales de abril. El documento está firmado por el Doctor Francisco Javier Cobo Reinoso, especialista en Microbiología y Parasitología, Doctor en Medicina y Jefe de Sección del Servicio de Enfermedades Infecciosas en el Hospital Ramón y Cajal. Expone que "la paciente ha sufrido una complicación infecciosa denominada fascitis necrotizante tras los procedimientos de cirugía plástica, pero excepcional".
La defensa ha solicitado que se incluyan otros 19 casos "bastante similares" a este, puesto que "acreditan el carácter generalizado, por no decir masivo, de esta mala praxis que se hacía por parte de CEME". También se ha pedido que se investigue a la clínica al sospechar que no se trata de "una mala praxis aislada".