La Comunidad de Madrid refuerza la integración de las personas con discapacidad física gracias a su Oficina de Vida Independiente, para la cual destina 1,8 millones de euros anuales con el fin de facilitar que estos madrileños sean personas activas y plenamente integradas en la sociedad. Este organismo, inaugurado en 2006, es un servicio pionero de apoyo a la vida autónoma, el primero de estas características en España, que se fundamenta en la figura del asistente personal como sustento para la independencia de este colectivo.
Así lo ha señalado la consejera de Familia, Juventud y Política Social, Concepción Dancausa durante la presentación de la Fundación 360 para la autonomía personal, entidad perteneciente a la Federación de Asociaciones de Personas con Discapacidad Física y Orgánica de la Comunidad de Madrid (FAMMA COCEMFE Madrid). Al acto han acudido también el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, y el viceconsejero de Transportes e Infraestructuras, Carlos Díaz-Pache. Dancausa ha felicitado a los promotores de esta nueva entidad, “cuya puesta en marcha demuestra que nos movemos en una sociedad sana, con inquietudes y con afán de mejora constante”.
En la Comunidad de Madrid residen más de 380.000 personas con un grado de discapacidad reconocido igual o superior al 33%. Más de la mitad de ellas (el 55%) tiene alguna de carácter físico, mientras que en el 27,4% de los casos es de tipo psíquico (intelectual y enfermedad mental) y el 13,5% sensorial (auditiva o visual). La Consejería de Familia, Juventud y Política Social ha aumentado un 24,5% el presupuesto para su atención, pasando de los 341 millones de euros del anterior ejercicio a los 425 millones en 2022. Dancausa ha concretado que la región “cuenta con una red de cerca de 1.600 plazas con el objetivo de ofrecerles una atención profesionalizada y personalizada”.
Metro de Madrid es el primer suburbano metropolitano de Europa en cuanto a número de elevadores
Además, la apuesta por la accesibilidad en los sistemas de transportes de la región es un factor clave en la integración de los usuarios con movilidad reducida. Así, por ejemplo, mediante la mejora en las paradas de los autobuses interurbanos de la región se contribuye a la homogeneización de la calidad y servicios que ofrecen los intercambiadores y la red de Metro, todos ellos dotados de los sistemas más avanzados. Con un total de 1.712 escaleras mecánicas y 558 ascensores, Metro de Madrid es el primer suburbano metropolitano de Europa en cuanto a número de elevadores y el tercero del mundo.
Para seguir avanzando en este campo, la empresa pública madrileña trabaja desde distintos ámbitos y cuenta con un nuevo Plan de Accesibilidad e Inclusión 2021-2028, dotado con un presupuesto de 148,6 millones y que permitirá mejorar en esta materia las estaciones de su red del 67,5% actual a un 82%.