Ya lo anunciaron: profesionales del sector de la peluquería, estética y barbería continúan con su lucha, como comunicaron hace alrededor de un año, para reclamar la bajada del IVA al 10% en el ámbito de la Imagen Personal. Para ello, esta vez se han manifestado por el centro de Madrid, concretamente entre la Plaza de Cibeles y el Ministerio de Hacienda, "tras 10 años de castigo fiscal, desde que en 2012 se aprobó de forma excepcional, y por un periodo de tiempo limitado, el incremento del IVA del 8% al 21% a las peluquerías y salones de estética".
La marcha ha contado con la participación de las principales federaciones y asociaciones del sector a nivel estatal, autonómico y provincial, como son ANEIP, FANAE, ANEPE-IMPE, ANEPE, FEDCAT o EIPEF, entre otros, con el apoyo y coordinación de la plataforma de imagen personal 'Creer en Nosotros' y el eslogan "SOS IMAGEN PERSONAL: IVA REDUCIDO. PRESUPUESTOS GENERALES ¡YA!", que tiene como objetivo transmitir al Ministerio de Hacienda y al PSOE la exigencia de que se incorpore la recuperación del IVA reducido a la imagen personal en los Presupuestos Generales del Estado 2023 durante su tramitación, teniendo en cuenta, indican desde la Alianza Empresarial, "que el debate sobre la bajada del IVA está presente en los PGE, reconociendo la necesidad de aplicarla a los productos de higiene femenina o a las tarifas energéticas".
En los Presupuestos Generales de 2022 esta reclamación contó con el respaldo de 23 de los 24 partidos políticos con representación en el Congreso y en el Senado, y se espera que obtenga de nuevo un apoyo mayoritario a las enmiendas que la contemplen, presentadas por diferentes partidos de todo el espectro político. Se trata de "una medida urgente para responder a la extrema vulnerabilidad de un sector que sigue siendo olvidado por el Gobierno central a la hora de diseñar los diferentes planes de ayudas contra la escalada de precios o la crisis energética, que ha hecho que a los salones de peluquería y estética se les haya encarecido la factura de la luz más de un 30%".
Hace que aproximadamente un 20% de toda su actividad esté instalada en la economía sumergida
El pasado mes de noviembre tuvimos la oportunidad, en Televisión Digital de Madrid, de hablar con José Luis Azañón, portavoz de la Alianza para la bajada del IVA al 10% a peluquería y estética, con motivo de los encierros que se produjeron tanto en Madrid como otras ciudades españolas, a modo de una reivindicación que se denominó "La rebelión de las tijeras rotas", y tras la negativa del gobierno central a reducir este tipo impositivo. "Una vez más, el PSOE, de una manera antidemocrática, ha evitado el debate y la votación de enmiendas dentro del marco de los Presupuestos Generales del Estado para recuperar nuestro tipo de IVA reducido como sector esencial de la economía, así considerados por el propio Gobierno", declaraba Azañón entonces.
En estos momentos, "con una inflación desbocada y el aumento del precio de la luz y otros costes operativos" estos establecimientos aseguran "haber sufrido un incremento de los gastos del 27,2%, lo que supone la puntilla para un sector que solo ha recuperado aún el 79,8% de su actividad prepandemia y con una facturación respecto a la de 2019 que ha retrocedido un 20,2%". Una situación que ha desembocado "en el progresivo ennegrecimiento del sector, que hace que aproximadamente un 20% de toda su actividad esté instalada en la economía sumergida, lo que constituye un factor de riesgo y un mayor deterioro de las pymes con el aumento de la competencia desleal, provocada por la intransigencia del gobierno en reconocer la excepcionalidad del sector y la particular incidencia que tiene el IVA al 21% en un sector de mano de obra intensiva, y que lo convierte en un mero recaudador de impuestos para Hacienda sin posibilidades de compensación".
La manifestación, indican los convocantes, "ha permitido visibilizar el extremo sufrimiento actual del sector y su capacidad de resistencia, tras dos años reivindicando la restitución de su IVA reducido a través de las más de 400 concentraciones y manifestaciones integradas en la campaña de "La rebelión de las tijeras rotas". Como en anteriores actos reivindicativos y de protesta, la manifestación ha recurrido a todo tipo de eslóganes, tales como “menos vetos y más votos”, “somos trabajadores, no recaudadores”, “el IVA general era temporal”, “Sánchez, escucha esta no es tu hucha”, y “el IVA pa cuándo”, junto con coreografías y cánticos para llamar la atención de los transeúntes, "que han mostrado su solidaridad y su simpatía con uno de los sectores más apreciados por el conjunto de la ciudadanía", concluyen.