Juan Lobato, el hasta ahora secretario general del PSOE en Madrid, ha dejado el puesto. Así lo ha anunciado a través de una carta en la que reconocía la necesidad de "poner freno a una situación de enfrentamiento y división grave que se estaba generando en el partido, que sólo iba a dañar al PSOE en Madrid, y a los avances en la unidad que habíamos conseguido en estos tres años".
En este sentido, Lobato ha señalado que él siempre ha creído en el diálogo y el debate, el servicio público, la honestidad y el interés general como "la esencia" de la política. Además, tiene fe en la contraposición de ideas para "acordar cosas que beneficien a los ciudadanos. Porque el bien común tiene que estar por encima de cualquier posición política".
Así mismo, el hasta ahora líder del PSOE en la región también ha lanzado varias perlas al aire, asegurando que él no cree en la "destrucción del adversario, en la aniquilación del que discrepa y del que piensa diferente. Insisto: para mí la política es otra cosa. Y la lealtad a mi partido es trabajar para poner en marcha sus principios, aquello que lleva más de 145 años representando: la igualdad, la libertad, la democracia, la educación y la sanidad pública, la defensa de los más vulnerables, el no dejar a nadie atrás".
"Sin duda mi forma de hacer política no es igual ni quizá en ocasiones compatible con la que una mayoría de la dirigencia actual de mi partido tiene", sentencia Lobato, añadiendo que "lo asumo democráticamente. Pero no puedo renunciar a ser como soy y como he sido siempre". También ha dejado claro que da un paso en el liderazgo del PSOE, pero cuentan con su compromiso como militante.
"El PSOE ha sido siempre una organización abierta, que se alimenta del debate entre todos. Un partido que debe tomar las decisiones por mayoría y esas decisiones se deben argumentar, compartir y no imponer. Y en el que, una vez acordadas, se defienden y se aplican por todos. Un PSOE en el que no se ataca o se denosta al que no coincide con la opinión de la dirección del partido en cada ámbito territorial", concluye el ex dirigente, agradeciendo el apoyo de los "miles de militantes de toda España", y esperando que la decisión no suponga "una decepción" para ellos. "Termino esta etapa política esperando haber estado a la altura de lo que mis padres, profesores y muchos referentes del partido me enseñaron. Y también a la altura de lo que yo intento transmitir a mis hijos cada".