Londres es sobria, pero con mucha vida y encanto. Solo hay que patearse un poco la ciudad a orillas del Támesis para descubrir todo el potencial y rincones maravillosos que tiene. Además, que en todos los puntos de la capital hay sitios interesantes para descubrir.
Empiezo el recorrido por los puntos que cualquier turista sabe que hay en Londres y que están a un puente de distancia, me refiero al Big Ben y la noria London Eye. Son de las atracciones de la capital británica que más gente atraen y que más decepciona, especialmente el Big Ben porque en realidad es bastante más pequeño de lo que aparece en las imágenes.
Otro de los puntos que merece la pena disfrutar es de la Abadía de Westminster y el Palacio de Buckingham. Para disfrutar de este segundo espacio habrá que cruzar los jardines públicos de la residencia de la monarquía británica, que son el Green Park y el St James Park. Poco más lejos esta el inmenso Hyde Park con sus famosas ardillas correteando por allí.
Alrededor de este núcleo de parques se encuentran las calles comerciales más famosas de la ciudad como es Brompton Road, dónde se encuentra el mítico almacén Harrods, y Oxford Street, donde se encuentran todas las tiendas multinacionales y otro centro comercial como es Selfridges.
Siguiendo de compras, hay dos calles comerciales más que cruzan ambas con Oxford Street: una de ellas es la calle de las tiendas de marca, New Bond St y por otro, la otra calle comercial por excelencia que es Regent St, con la mítica juguetería Hamleys.
Al final de Regent St, se encuentra Picadilly Circus con su icónica fuente y los famosos letreros. Cerca de ahí esta Trocadero, Leicester Square y China Town, otro puntos que merece la pena visitar.
Candem Town, otros mercados y los museos
Las compras siguen marcando la ciudad, y merece la pena visitar estos espacios, aunque no compres nada. Por eso, la siguiente recomendación es el mercado de Candem Town con sus tiendas de todo y sus caballerizas repletas de puestos de ropa, comida, y souvenirs.
Otro mercado que recomiendo es Spitalfields Market, con cosas antiguas y ya que estas por la zona merece la pena visitar la zona con sus tiendas vintage y ambiente retro de la zona.
Siguiendo por los mercados no hay que dejar el de comida Borough Market al sur del Támesis. Cerca de ahí esta el edificio más alto de todo Londres, The Sard, y que se puede subir para ver toda la ciudad. Por esa zona, se encuentra el Tower Bridge y la Torre de Londres, ambos sitito merece la pena visitarlos.
Dejando atrás los mercados, hay que visitar los museos londinenses porque son gratis y están cargados de arte e historia. Empezando por el British Museum que es una maravilla por todo lo que contiende desde momias egipcias, pasando por las metopas del Partenón y terminando por bustos romanos.
Otro museo que esta bien ir, y especialmente si vas con niños, es el Museo de Historia Natural, si el de una noche en el museo. Allí encontrarás esqueletos de todo tipo de animales y muchas pantallas que te explican cosas de la naturales. Al lado esta el Victoria & Albert Museum que también merece la pena pasarse porque tiene replicas del David de Miguel Ángel o del Pórtico da Gloria de la Catedral de Santiago de Compostela.
Terminando por el arte, hay que visitar la National Gallery, donde se expone el Matrimonio Arnolfini, la Venus del Espejo o un Leonardo Da Vinci. Y también hay que pasarse por el Tate Modern y ver la colección de arte moderno que tienen allí.
Como veis, Londres tiene mil puntos a los que ir y ver. Aquí solo hay una muestra, y como suelo decir pateándote la ciudad seguro que descubres algún espacio que por espacio o desconocimiento no haya entrado en estas líneas.