Intuíamos que algún día iba a pasar y ese día ha llegado. Tras casi un siglo de vida, Madrid quitará de sus calles las casi 2.000 cabinas telefónicas que existen. ¿Eres de los que recuerda esos momentos en los que las cabinas eran la única forma de ponerse en contacto con otra persona? Si es así, esta noticia te llenará de nostalgia. Sin embargo, hace mucho tiempo que no vemos a alguien realizando una llamada desde una cabina telefónica. Estos elementos han entrado en desuso y desaparecerán definitivamente de nuestras calles.
Se eliminarán los 1.800 teléfonos de uso público de las calles madrileñas a partir del segundo trimestre de 2022. Se aprobó en el Consejo de Ministros, con el proyecto de la nueva Ley General de Telecomunicaciones (LGT) que eliminará también las guías telefónicas. Actualmente, la Ley de Telecomunicaciones obliga a que exista un teléfono público de pago en las localidades de más de 1.000 habitantes. En los municipios de menos habitantes, debe haber una cabina si lo requiere el servicio público. Sin embargo, a partir de 2022, la ley eliminará esta obligación.
En los últimos tiempos, solo se llegó a contabilizar una llamada a la semana, más de la mitad de la media que se registró hace dos años, según datos de Telefónica que era la compañía que se encargaba de sus costes y mantenimiento hasta ahora.
En los últimos tiempos, solo se llegó a contabilizar una llamada a la semana
Segunda vida a las cabinas
Algunos municipios de la Comunidad de Madrid están dando una segunda vida a las cabinas telefónicas y las están convirtiendo en espacios realmente útiles. San Sebastián de los Reyes, por ejemplo, aprobó en Pleno convertirlas en pequeñas bibliotecas y puntos de wifi gratuito. También tenemos el ejemplo de Leganés, que ha solicitado que se reconviertan las cabinas y se modernicen siguiendo el modelo de Nueva York.
Mientras las cabinas desaparecen, hay una nueva que llega al barrio de Chamberí. Una gran cabina roja para recordar a Antonio Mercero como homenaje a su película 'La cabina'.