El alcalde de Madrid y la presidenta de la Comunidad han firmado dos convenios de colaboración que garantizan y amplían la atención a las personas en situación de dependencia en la ciudad usuarias de servicios como ayuda a domicilio o teleasistencia. El importe conjunto asciende a 183.038.141 euros y su plazo de ejecución es de dos años desde el próximo 1 de enero hasta el 31 de diciembre de 2023.
El primero de ellos de con 149.882.886 euros, está financiado por la Comunidad y prorroga el acuerdo que mantienen desde hace años las dos administraciones para ofrecer a personas dependientes servicios como la ayuda a domicilio, la teleasistencia o la actividad de centros de día y residencias municipales, todos ellos gestionados y prestados por el Ayuntamiento de Madrid. El segundo responde al Plan de Choque en Dependencia 2021-2023 acordado por la Administración central con las Comunidades Autónomas y destinará 33.155.255 euros de fondos estatales al objetivo específico de ampliar el número de beneficiarios de estos servicios.
Así, está previsto que, gracias a esta inversión y hasta finales de 2023, los receptores del servicio de teleasistencia en la capital pasen de los actuales 30.984 a 43.484 personas, mientras que la ayuda a domicilio llegará a 23.500 beneficiarios frente a los 19.016 que la disfrutan ya. Por su parte, se incrementará el número de usuarios que asisten a centros de día de 3.653 a 4.278.
En total, estos incrementos sumarán 17.609 nuevos perceptores de servicios a los 53.653 madrileños que ya los reciben, un aumento del 32,8 % que dejará la cifra total en 71.262 personas beneficiarias a finales de 2023
En cuanto a los programas para personas mayores en situación de dependencia en el marco de estos convenios, cofinanciados con un 30 % por el Ayuntamiento de Madrid, ofrecen servicios como la ayuda a domicilio o la teleasistencia, que tienen como objetivo apoyar la permanencia en su domicilio el mayor tiempo posible de personas que se encuentren en situación de riesgo por razones de edad, discapacidad, enfermedad o aislamiento social.
Además, los centros de día prestan atención integral durante la jornada a dependientes mayores de 60 años -o de 55 en caso de padecer Alzheimer- con el fin de mantener o incrementar su autonomía personal y respaldar a sus familias o cuidadores. Las residencias para mayores ofrecen vivienda permanente a personas que, por su situación sociofamiliar o por limitaciones en su vida diaria, no pueden ser atendidas en sus propios domicilios y requieren una plaza en estas instalaciones.