La Comunidad de Madrid ha estrenado hoy una nueva Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos en el Hospital público Universitario La Paz, centrada en el niño y su familia, dotada con tecnología de vanguardia y que incorpora espacios para la atención a los pacientes críticos. Además, triplica en espacio a la anterior y se actualiza a los estándares de este tipo de unidades, que han evolucionado radicalmente con respecto a la época de su diseño original.
El consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, ha visitado esta mañana las nuevas instalaciones de este centro público, que han contado una inversión en obra y equipamiento superior a los 3 millones de euros. Permitirán obtener la máxima funcionalidad en la atención a los pacientes, ampliar la capacidad asistencial y mejorar la humanización, así como las condiciones de trabajo de los cerca de 80 profesionales que forman parte del servicio.
La nueva UCI pediátrica tiene un ambiente con luz natural y un notable incremento de espacio para la atención. Cuenta con 1.780 metros cuadrados, lo que supone 1.220 más que la antigua, y pasa de 16 puestos a 20, con diez habitaciones individuales, un box de procedimientos especiales con dos camas y cuatro habitaciones dobles. Además, otras doce tienen presión positiva, lo que minimizará el riesgo de infecciones cruzadas, y dos tienen presión negativa y esclusas para el aislamiento de niños con enfermedades altamente contagiosas.
Todas las estancias tienen aseo independiente para el paciente y zona para acompañante con cama, aumentando notablemente su privacidad y descanso. La integración de los padres en el cuidado de sus niños cuando están graves facilita su recuperación y mejora el nivel de aceptación del propio menor. Se trata, por tanto, de un avance de la sanidad pública madrileña en materia de humanización al que se añade la disponibilidad de una nueva área para los padres con un espacio de trabajo, otro de descanso con un sofá y otro para comer con nevera y microondas, así como taquillas y dos baños con ducha.
La reforma incorpora además un área específica para farmacia y preparación de medicación, almacenes, sala de procedimientos, área de entrenamiento y simulación y otras estancias para profesionales y actividades de apoyo a la tarea asistencial más amplias y con luz natural.
El servicio atiende cada año a cerca de 1.000 niños de toda España con una gran complejidad médico-quirúrgica
Monitorización de vanguardia
Otro cambio sustancial en esta unidad del Hospital público La Paz es la supervisión y control de enfermería, que pasa a estar descentralizada, disponiendo de una serie de puestos de control con visión directa y monitorización de los pacientes frente a todas las habitaciones. La monitorización también es de última generación e integra video, por lo que informa en tiempo real de todos los datos de constantes vitales, respiradores, bombas de perfusión, sistemas de depuración renal y monitorización neurológica. Al tener los controles y alarmas descentralizados, se pueden vigilar todos los procedimientos fisiológicos del niño desde el exterior de la habitación sin necesidad de entradas innecesarias que interfieran en el descanso del niño.
La unidad dispone también de un sistema de monitorización medioambiental que genera alertas de contaminación acústica y química, entre otras. Además, el tratamiento de la climatización permite responder simultáneamente a las diferentes necesidades planteadas por la patología y condición personal del niño, cuya variabilidad es especialmente importante, ya que son enfermos que pueden tener entre el mes de vida y los 18 años de edad con morfologías y requerimientos propios de su edad y constitución física.