Adiós 2021. Adiós a un año irregular, cargado de esperanzas, decepciones, buenas y malas noticias. Adiós a un año que nació con la seguridad de no poder ser peor que su antecesor pero que demostró, en pocas semanas, que no hay que fiarse de las apariencias.
Así, diciendo adiós a 2021, decimos también adiós a Filomena que, aunque llenó Madrid de increíbles estampas nevadas, a los más pequeños nos quitó algunos días de clase en un año en el que, aunque parezca extraño, solo deseábamos poder ir al colegio con normalidad. Al menos, para bien o para mal, el COVID nos había preparado para la enseñanza online.
Decimos adiós, un año más, a volver a la normalidad. Esperada normalidad que todos ansiamos conseguir y que parece que no llega. Esperemos que en el 2022 tengamos más suerte.
Adiós a Pau Gasol, no volveremos a disfrutar de él en el baloncesto profesional, adiós a su magia, a una estrella de esas que parecían brillar cada vez más. Todo se acaba. Adiós a Messi y a Sergio Ramos en sus papeles de principales representantes de la Liga española. Suerte en esta nueva etapa. Adiós a las Olimpiadas de Tokio 2021, o 2020… las recordaremos siempre, por deseadas, por peculiares y silenciosas y por ser, de manera casi milagrosa, igual de divertidas y emocionantes que siempre.
Pero no es solo es tiempo de decir adiós. Decimos también gracias. Gracias a todas esas personas que con su esfuerzo han contribuido a hacer de 2021 un año un poquito mejor. Gracias a Disney por enseñarnos el lado más gamberro y divertido de Cruella, por hacernos disfrutar con la otra parte de la historia, con una trama, unos actores, una música y un vestuario a la altura de las grandes películas de la historia. Gracias a Aitana, Dani Martín, David Bisbal y al resto de artistas españoles que han sabido reponerse a esta época tan complicada y han comenzado de nuevo a hacer giras y conciertos. Como damos las gracias a los atletas españoles que, tras meses de incertidumbre, parones en los entrenamientos, confinamientos, restricciones, pruebas y todo tipo de obstáculos, han conseguido triunfar en las olimpiadas con medallas y buenos resultados.
Y tras despedirme de 2021, quiero decir hola al 2022
Gracias a los sanitarios, científicos y demás profesionales que han logrado crear una vacuna para combatir a este odioso virus que ha puesto patas arriba nuestras vidas. Gracias por protegernos, por proteger a nuestros mayores, por acercarnos un poquito al fin de esta pesadilla. Gracias y enhorabuena.
Y enhorabuena por último a todos los niños que cada día han luchado durante este 2021 por no perder la paciencia, por adaptarse a cada nueva situación, cada nueva medida, sin perder la ilusión y la alegría.
Me gustaría decir adiós, pero no puedo, a las mascarillas, al virus, a las restricciones, a vivir con precaución y miedo. No puedo decir adiós a los confinamientos parciales ni a las cuarentenas, aunque la idea de un confinamiento total como el vivido en 2020 sí parece ya parte de nuestro pasado.
No podemos decir adiós a la catástrofe natural más grande que ha vivido nuestro país. El volcán de la Palma parece que se ha calmado, pero las consecuencias no se acabarán de repente, nos acompañarán todavía durante muchos años. Acompañarán a todos los palmeros, y con ellos, a todos los españoles.
Y tras despedirme de 2021, quiero decir hola al 2022. Hola a un año que comienza de nuevo con gran incertidumbre pero que estoy segura de que será mejor que 2021 y que 2020. Un año en el que nuestros sueños se cumplirán. En el que veremos la luz al final del túnel. Un año en el que no nos podemos olvidar de sonreír, de divertirnos y de disfrutar. Porque 2022 solo habrá uno, y va a ser genial ¡Feliz Año Nuevo!