Coslada recibirá un total de 1.985.780 euros, correspondientes a los Fondos Europeos, Next Generation EU en el marco del componente 2 del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de España, por el que se desarrollará un Programa de rehabilitación para la recuperación económica y social en entornos residenciales.
Cronológicamente, la solicitud para beneficiarse de estas ayudas europeas se aprobó de manera definitiva en Junta de Gobierno Local en febrero de este año. Con anterioridad, con fecha de junio de 2023, se elaboró un documento técnico de propuesta de rehabilitación de viviendas.
Finalmente, todo esto se ha materializado en el acuerdo firmado entre el alcalde de Coslada, Ángel Viveros, y el secretario de Estado de Vivienda, David Lucas, en la sede del Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana.
El regidor cosladeño se mostró “muy satisfecho por un acuerdo como este que dará paso a un proyecto que beneficiará a muchas vecinas y vecinos”. A su vez, Ángel Viveros, explicó al término del acto de firma que “el Programa tiene como objeto la financiación de la realización conjunta de obras de rehabilitación en edificios de uso predominante residencial y viviendas, incluidas las viviendas unifamiliares, y de urbanización o reurbanización de espacios públicos dentro de ámbitos de actuación denominados (ERRP) previamente delimitados”.
La cantidad dispuesta está destinada a la rehabilitación de viviendas particulares en una primera fase en cuatro zonas residenciales:
- Zona 1-Casco
- Zona 2-Parque Blanco
- Zona 3-Ciudad 70
- Zona 4-Barrio de la Estación
Los Entornos Residenciales de Rehabilitación Programada (ERRP), anteriormente delimitados como zonas, “Casco Urbano-Ciudad” constituyen un área discontinua formada por un total de 12.584 viviendas, 712 edificios, y 131 hectáreas. Estos edificios han quedado identificados mediante las referencias y portales en base a la delimitación cartográfica aportada por el Ayuntamiento de Coslada como parte de la documentación correspondiente.
En el convenio se acuerda una primera fase de actuación, cuya inversión beneficiará a 72 viviendas (se trata de cofinanciación, ya que el 80% lo tendrían que aportar los vecinos). Entre los aspectos más destacados de estas ayudas que completarán esta importante inversión de las comunidades de vecinos, se encuentra la posibilidad de utilizar estos fondos para la retirada de amianto en edificios particulares. También se contempla la mejora energética en un 35% anual, actuando sobre las ventanas, envolventes, la impermeabilización o bajantes, así como la mejora de la accesibilidad.