El artista presenta en la muestra un conjunto de grabados y monotipos realizados en los últimos años que desarrollan los temas y estéticas que le interesan. Las imágenes aluden al paso del tiempo, a la mutabilidad de las cosas, a la vida entendida como recorrido y viaje. La línea, traslación gráfica de ese recorrido, protagoniza muchas de las obras, y las líneas que al entrecruzarse tejen estructuras, en ocasiones orgánicas y en otras geométricas que ponen en mutua correspondencia dos actos creativos que comparten proceso y estructura: tejer y escribir.

La cultura oriental está presente en muchas estampas, conceptual y estéticamente. Para los artistas chinos la caligrafía es un acto que emula la creación del mundo, el trazo como acto primero que es proyección espiritual del artista y da sentido a la realidad.