El proyecto de reforma de la Avenida de Berlín, eje principal del Barrio de Ciudad 70, empieza a tomar forma. Es una actuación que ha superado obstáculos ajenos al Ayuntamiento de Coslada; no obstante, a pesar de los mismo, se ha logrado que, finalmente se haga realidad.
Cuando llegue a su fin, la avenida de Berlín presentará una imagen más humanizada, pensada, por encima de todo, con un objetivo fundamental: la mejora de la calidad de vida de los residentes en el barrio.
Un proyecto que apuesta por la movilidad sostenible ya que incorpora un carril bici a lo largo de toda la Avenida de Berlín con longitud de 2.100 metros, o mejora la accesibilidad universal con la supresión de las barreras arquitectónicas para personas de movilidad reducida. El plazo de ejecución es de 8 meses y el importe será de 2.380.199,64€. Habrá un nuevo alumbrado público con tecnología led, consiguiéndose un ahorro del 40% con respecto al alumbrado tradicional. Se van a instalar 129 luminarias led.
Es un orgullo hablar de este proyecto como iniciado, porque era una necesidad urgente
El objeto de la actuación es triple ya que se trata de crear un espacio público vivo y de calidad, de apostar por un urbanismo de proximidad y de garantizar accesibilidad universal. Es un proyecto que mejorará la escena urbana del barrio y la calidad de vida de los y las residentes ya que apuesta por dar más espacio a peatón, ganar en zonas verdes y reducir la contaminación acústica. Asimismo supone un paso adelante en eficiencia energética.
Se actuarán desde el encuentro de la Avenida de Berlín con la rotonda de la Avenida de Vicálvaro hasta la pequeña glorieta existente al final de la calle, junto al CEE Rosa Parks. También se interviene en los encuentros con la Avenida de Madrid, la Avenida de Viena, la Avenida de Frankfurt, la Avenida de Roma y la Calle de Honduras. Además se ejecutará una comunicación peatonal accesible entre las Avenidas de Lisboa y de Berlín, facilitando la conexión de ambas zonas de Ciudad 70.
En el diseño se ha contado con la opinión y las aportaciones del colectivo vecinal, un elemento fundamental para mejorar el barrio que demandan sus residentes.