“Nos vemos en la puerta del Café Comercial”. Durante más de 130 años, esta ha sido una de las frases más repetidas entre los madrileños y es que el Café Comercial fue y continúa siendo un punto de encuentro clave de la capital. Editado por el poeta y escritor Rafael Soler, es una obra que recopila recuerdos.
Testigo de quedadas y encuentros diversos, del cierre de negocios entre copas y buenos bocados, de risas y lamentos, historias de amor, o simplemente, de historia con mayúsculas, el legendario café es una crónica viviente de memorias y ha llegado el momento de contarlas bajo la forma de evocaciones, testimonios, poemas y relatos en palabras de sus protagonistas.
Situado junto al barrio de Malasaña, en la glorieta de Bilbao, el Café Comercial cerró su actividad el 27 de julio de 2015, tras 128 años desde su inauguración en 1887. La ciudad no quiso acostumbrarse a la desaparición de este icónico espacio, que permaneció cerrado durante casi dos años.
Esta es la historia del Café, contada por algunos de sus protagonistas, parroquianos ilustres y gentes de bien con su personal anécdota, su evocación de lo vivido y bebido, su testimonio y su apuesta de futuro
Así, el 27 de marzo de 2017, abrió de nuevo sus puertas, gracias a la determinación de un pequeño grupo de soñadores. El Café Comercial volvería a ser un lugar donde cultivar y rendir homenaje a la literatura, la música, el cine o la comedia, pero también, la gastronomía.
Desde su reapertura, además de su extensa oferta cultural, que incluye actividades como presentaciones literarias, monólogos, conciertos o sesiones de cine, el restaurante ha destacado también por su propuesta de sabores castizos y recetas de siempre elaboradas con la mejor materia prima.
El responsable de su carta es el chef Pepe Roch y entre sus platos más destacados se encuentran entrantes como los carabineros y gambas sobre patatas ali oli o la ya clásica ensaladilla “El Comercial”, así como generosas raciones como los taquitos de merluza de pincho a la romana con muselina de ajo frito.
Tanto para disfrutar en su restaurante de una comida a la carta o de las sugerencias del día, como desde su barra de cocina ininterrumpida con diferentes raciones, cualquier momento del día tiene un sabor único en Café Comercial.