Avisó Pellicer de forma tajante que la Copa no sobraba. Solo hizo falta ver cinco minutos de partido para ver que la palabra del técnico es tan firme como la convicción del equipo. El Fuenla, con los cambios lógicos por lo cargado del calendario salió al Torres a pelear el partido de tú a tú al Cádiz y a buscar un histórico pase a octavos de final de la Copa del Rey. Hasta siete cambios hubo en el once.
Empezando por la portería con Morro y continuando por Pol Valentín, Iñaki (defensa recién llegado al filial que debutaba), Cristóbal, Amigo (del filial también), Cheick y Anderson. Ni se notó tanta variación. Buenas noticias para un cuerpo técnico que empieza a recuperar efectivos una vez pasada la plaga de lesiones y con el respeto del COVID-19.
Salió decidido el Fuenla, pero enfrente tenía a un primera como el Cádiz y también se hizo notar con un par de aviso de Andone que se marcharon desviados. El balón se lo quedó el Fuenla, que se acercaba más a las inmediaciones del área del Cádiz, aunque sin llegar a inquietar a David Gil. La mejor ocasión del partido, eso sí, fue para el Fuenla en un centro de Pol Valetín que se envenenó y se estrelló en el larguero. La primera parte acabó con dominio del Fuenla y con un Miguel Morro tranquilo. La segunda parte se inició con cambio en el Fuenla. Konaté entró en lugar de Cristóbal, que dejó el brazlete a Sotillos.
Salió decidido el Fuenla, pero enfrente tenía a un primera como el Cádiz y también se hizo notar con un par de aviso de Andone que se marcharon desviados
Lo siguiente fueron dos buenas ocasiones para Anderson, pero ambas se fueron desviadas. Pellicer olió la sangre y movió el banquillo para dar refrescos. Entraron Kante y Pedro León por Zozulia y Cheick. El Cádiz también tuvo alguna ocasión como la de Chapela en el 60. EL Fuenla respondió con un remate de Pulido que paró David Gil. Lo intentaba el Fuenla y Cervera lo notó y dio entrada al Pacha Espino y a Álvaro Negredo.
El Fuenla siguió a los suyos y en el 82 casi logra el tanto del pase Pedro León. Paró David Gil. En el 88 un pase largo de Dieguez casi habilita a Kante para marcar, pero el meta estuvo rapidísimo. El jarro de agua fría para el mejor equipo que había sobre el campo llegó antes del pitido final con un disparo desde fuera del área de Alarcón. Golpe injusto para un Fuenla que fue superior. Toca pensar en LaLiga y en el Girona, pero con la cabeza alta.