El partido arrancó con una demoledora salida de los catalanes a la que los nuestros respondieron a rachas.
Desde la dirección de Laprovittola creció el Divina Seguros Joventut, aprovechando que la defensa del Fuenla no fue constante. Esto contrarrestaba el gran partido de Smits con poco acompañamiento en líneas generales porque el argentino si le secundaron Conger y Birgander, mientras que Smits tuvo menos acompañamiento. Ya no sólo fue en la rotación, sino sobre todo en las prestaciones. El cansancio marcó el partido del Fuenla.
Los de Joventut empezaron muy fuertes. Tras la canasta inicial de Vargas, parcial de 11-0 para el Joventut que en nada ya estaba 10 arriba y las sensaciones fueron que unos se jugaban algo y otros no estaban en el terreno de juego. El parcial del primer cuarto fue de 20-7. Unos iban a por el partido con fuerza, mientras que los otros querían ganar pero las fuerzas no estaban de su lado. Lo agradecía López-Arostegui y Laprovittola para dirigir así con solvencia.
Peor no le podía ir a los de Néstor García. El comienzo del segundo cuarto fue otra tortura para ellos. En dos minutos el partido parecía que se podía romper del todo 25-7. El Joventut era un tsunami que pasaba por encima de los fuenlabreños. Aunque una reacción de Vargas sirvió para que los suyos se acercaran a 8, quedando el marcador 33-25 con algo menos de cuatro para el descanso.
Al final del partido el Fuenla se puso a tres puntos pero el joventut supo sostenerse por delante
El encuentro se equilibró, ya que la defensa del equipo visitante cerró el camino a su aro, y apareció la experiencia de Popovic para limar la renta hasta un amenazador 4 del minuto 18 con 36-32 en el marcador. Carles Durán paró el partido para evitar lo peor, y sirvió para parar al Fuenla y llegar al descanso con una ventaja más acorde a lo que fue la primera mitad: 47-34.
Dos triples de Smits dieron algo de vida a los visitantes que en el minuto 26 iban 59 a 51 y los del 'Che' García pidieron tiempo muerto porque de nuevo la Joventut recuperó ventaja entorno a diez puntos: 73-61 cerca del minuto 30.
Los nuestros aún seguían metidos en el partido pese al vendaval que soportaban. Se acercaron de nuevo en el marcador (73-67) y otra vez se alejaron (77-67) en dos minutos y cuarenta segundos. La irregularidad de ambos mantenía la emoción del encuentro.
Casi seis minutos por delante y el Fuenla perdió a Smits por personales. Apareció Popovic para tirar de orgullo y obrar un milagro. Momentáneamente el Montakit se puso a tres puntos pero el Joventut supo sostenerse por delante y llevarse una victoria que fue más que justa y que los deja un año más en la Liga Endesa.