¿Qué supondría el traslado?

Según los datos facilitados por CCOO, el 80% de la plantilla instalada en la sede de Ericsson en Fuenlabrada reside en la ciudad, lo que “supondrá un perjuicio enorme para la plantilla tanto a nivel económico como personal”.

Por su parte, la tecnológica argumenta la falta de flexibilidad por parte del propietario del edificio donde están instaladas las actuales oficinas en Fuenlabrada a la hora de negociar el coste.

Este traslado no es el primero que experimenta la compañía. Sus dependencias, primeramente ubicadas en Getafe, se trasladaron a Leganés y, posteriormente, en el año 2006, centralizó sus actividades en nuestra ciudad. Esto cambiará a partir de diciembre cuando Ericsson materialice su decisión.

Ante la que parece ser una decisión inamovible, los sindicatos piden al ayuntamiento que medie entre la empresa y el propietario del edificio, con el fin de mantener su sede en Fuenlabrada.