Las Fallas ya no solo se celebran en Valencia, sino que por vez primera salen de la ciudad del Turia y llegan al Centro de Arte Tomás y Valiente (CEART) de Fuenlabrada en una exposición colorista y mágica que abre sus puertas este jueves 23 y se prolonga hasta el 9 de enero.
La concejala de Cultura, Mónica Sebastián, asegura que esta muestra “es un tesoro único que nos permitirá viajar al interior de uno de los eventos más importantes del mundo, Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad”. Está integrada por un centenar de obras traídas de los dos grandes museos falleros -Museo del Gremio de Artistas Falleros y Museo Fallero de Valencia: ninots, trajes falleros, joyas, carteles y todo aquello que rodea esta fiesta.
Como el Ninot Indultat de 2019, o figuras míticas como las que reproducen a los humoristas Tip y Coll o al gran Charles Chaplin ‘Charlot’.
El evento está comisariado por la dirección del Museo de Artistas Falleros y coordinada por el equipo del CEART
Una falla diseñada expresamente para Fuenlabrada
Esta exposición. además, contará con una falla diseñada y producida expresamente para Fuenlabrada por el Gremio de Artistas Falleros y que será quemada, como dicta la tradición, a la finalización de la muestra. La falla incluye elementos y valores que forman parte de la seña de identidad de la ciudad.
El evento está comisariado por la dirección del Museo de Artistas Falleros y coordinada por el equipo del CEART y responde a una de las prioridades del programa, analizar y estudiar el arte desde múltiples paradigmas artísticos y conceptuales.
La exposición incluye talleres gratuitos destinados al público infantil y familiar todos los sábados y domingos a las 10:30 horas en el CEART, en los que se podrán crear una falla con material fungible, inspirada en la actualidad, la realidad cotidiana u otras referencias culturales.
Otras exposiciones en el CEART
Además, en el CEART se podrá visitar la exposición de Tamara Feijoo ‘Ibid’ y las XXIII Jornadas Fotográficas de la Asociación Afopaz. En la primera la autora explora los límites del dibujo y la pintura expandida por medio de la representación figurativa y la segunda quiere hacer reflexionar al espectador sobre los estragos en el entorno ocasionados por el cambio climático.