Entusiasmo, ilusión y responsabilidad podrían ser trío de adjetivos perfecto para describir a Laura Rodríguez, beneficiaria de la beca de la Fundación Amancio Ortega, que le permitirá estudiar 1º de bachillerato en Canadá
Esta joven fuenlabreña estudia 4º de la E.S.O en el I.E.S Victoria Kent y su vitalidad fue la que la impulsó a presentar la documentación necesaria para solicitar la beca que podrá disfrutar en unos meses. “Para solicitar la beca tienes que presentar datos personales, incluida la renta, y documentación académica donde aparezca tu nota media de 3º de la E.S.O, que debe ser igual o superior a 7, y de la asignatura de inglés, que tiene que ser de un 8 como mínimo”, explica Laura.
Proceso de selección
El Programa de la Fundación Amancio Ortega prepara una prueba presencial a la que se presentan 10.000 aspirantes. Los exámenes constan de una prueba escrita, una oral y una entrevista personal. En la primera fase, los estudiantes deberán superar la prueba escrita, que junto a la nota media de 3º de la E.S.O, supone un 40% de la puntuación. Este porcentaje se suma al 60% de la renta per cápita de cada solicitante para obtener la puntuación final. En esta primera fase son seleccionados un total de 1800 aspirantes, de los cuales solo quedarán 600 tras realizar la prueba oral y la entrevista personal.
“Cuando pasé la primera fase me puse muy contenta, pero me tuve que centrar en preparar la prueba oral, ya que tienes que hablar durante tres minutos sobre un tema concreto y yo no tenía ni idea de qué contarles. Al final, hablé sobre mi deporte favorito, el voleibol”, recuerda Laura.
Aunque la prueba oral es en inglés, Laura cuenta que los examinadores le hicieron varias preguntas en español, puesto que “lo que quieren descubrir es si tienes la capacidad de vivir durante meses lejos de tu entorno e inmerso en una cultura que no es la tuya”.
Laura Rodríguez: "la idea de las pruebas es descubrir cómo te desenvolverías lejos de tu familia y amigos y en un entorno que no es el tuyo durante diez meses"
Un momento inolvidable
En el instituto de Laura vivieron el proceso de selección con la misma ilusión que ella, especialmente el momento en que la comunicaron que había sido una de las seleccionadas.“El día 28 de enero a las 13:00 horas salió la lista de los seleccionados y aunque yo no quería mirarlo porque estaba muy nerviosa, mi profesora paró la clase y mis compañeros cogieron mi móvil para mirar la lista. Cuando me dijeron que había pasado, me emocioné mucho. Ese día siempre estará entre mis mejores recuerdos”, confiesa Laura.
Inmersión lingüística y cultural
“La idea es que vivas la experiencia como si fueras una canadiense más, por lo que la Fundación no permite que viajes a España o recibas visitas durante tu estancia”, explica Laura, que ya está pensando en cómo será su rutina en Vernon, la ciudad donde vivirá con una familia de acogida el próximo curso.
“Siempre da miedo enfrentarse a algo desconocido, pero al final haré amigos y me adaptaré a mi rutina. Además, he leído que, en Canadá la vida de los jóvenes gira más entorno al instituto y al deporte, así que creo que me irá bien”, comenta Laura.
Durante el mes de marzo, los becados pasaran un fin de semana de convivencia en Madrid, durante el cual, profesionales de la Fundación se encargarán de orientarlos para que vayan preparados a Estados Unidos o Canadá. “Ahora solo queda esperar para irme y aprovechar esta oportunidad”, afirma Laura entusiasmada.