Cuando llueve en Fuenlabrada, aunque sean cuatro gotas, los vecinos miran por las ventanas, temerosos de que haya una inundación. Llevan así años, algunos calculan que cerca de cuarenta. Los vecinos del barrio de La Avanzada, en concreto, han perdido la esperanza de encontrar una solución.
Es ahora, justo después de que la Comunidad de Madrid sufriese las peores lluvias desde 1920, cuando el Ayuntamiento de Fuenlabrada da prueba de que las obras para evitar nuevas inundaciones han comenzado.
La pasada semana, mientras caían 34 litros por m2 en una hora, La Avanzada se convertía en lo que fue hace muchos años, un arroyo. El agua se colaba por los sótanos del edificio donde viven Manuel Magide y Ángel López, dos vecinos de la calle Méjico a quienes no les pillaba por sorpresa.
"Todos los años, siempre que llueve, tenemos el mismo problema y acabamos quitando los vecinos el agua y el barro", se queja Manuel, en una entrevista para la Televisión de Madrid. Su vecino, Ángel, asegura que la canalización que hay "no está preparada para recoger las aguas que vienen desde la calle Móstoles".
Ambos temen que un día el agua llegue a la altura de los contadores, situados en su sótano, y el problema sea todavía peor. "Hasta que no ocurra una desgracia, no se va a solucionar", se lamenta Manuel.
En la misma calle, una señal vertical destaca sobre el resto: ¡Atención! Prohibido estacionar con lluvias intensas. Para Manuel, esta advertencia "no es lógica" y se plantea cómo va a quitar su coche aparcado "si me voy a trabajar a Madrid y cae la tormenta". "Esas señales no deberían existir", critica.
Promesas y promesas
Hace dos años, en el Consejo del Barrio, cuenta Ángel, el Ayuntamiento les prometió información y una solución. "Nos dijeron que el problema lo tenía la Confederación Hidrográfica del Tajo, que es quien daba los permisos", señala Ángel, cuya respuesta no le convenció puesto que considera que el Ayuntamiento es el que "tendrá que reclamar al Canal de Isabel II (encargado de la obra) o a quien le corresponda el tema". "No sé de quién es la culpa pero las consecuencias las estamos sufriendo los vecinos", concluye Ángel.
Mientras Manuel amenaza con poner en marcha una denuncia conjunta entre todos los vecinos ante la falta de información y las promesas incumplidas, el Ayuntamiento se defiende.
La obra de los colectores comenzará a lo largo del verano.
El Director General de Proyecto de Ciudad de la Concejalía de Desarrollo Urbano Sostenible en Ayuntamiento de Fuenlabrada, Andrés De Las Alas-Pumariño Sela, en declaraciones a Soyde, entiende que "los vecinos están desesperados porque llevan años con el problema" y reconoce la necesidad de solucionar el problema con las inundaciones.
De las Alas explica a este medio que Fuelabrada tiene una orografía muy plana, cuenta con más superficie urbanizable y que antes pasaba un arroyo por las zonas afectadas, por lo que "hay dificultad para evacuar el agua, que busca su cauce natural".
Sin embargo, la solución parece que está cerca. El Ayuntamiento de Fuenlabrada y el Canal de Isabel II están trabajando conjuntamente en los preparativos para comenzar con la obra de los nuevos colectores, conductos del alcantarillado público en el que vierten sus aguas diversos ramales.
"Las obras que se pueden ver estos días son los preparativos para instalar más válvulas. Es el paso previo para hacer la obra de los colectores que comenzarán a lo largo del verano", explica el Director de Urbanismo. Además, hoy el Ayuntamiento se ha puesto en contacto con los vecinos para emplazarles el próximo martes 29 de junio a una reunión en la Asociación de Vecinos en las que les informarán de cómo se plantea la solución al problema.
El plan contempla 55 actuaciones en canalizaciones, colectores, tanque de tormentas. "Unas obras de gran calibre para hacer frente a las consecuencias del cambio climático, sobre todo en zonas inundables y antiguos acuíferos de la ciudad", ha explicado Javier Ayala, en las redes sociales.
Con un presupuesto de más de 62 millones de euros, los informes técnicos hechos y la obra adjudicada, solo queda la autorización de la Confederación Hidrográfica del Tajo, encargada de gestionar las licencias.
El proyecto forma parte del Plan Sanea, mediante el cual se mejorará el saneamiento de las zonas que más sufren durante las lluvias. Se comenzará por la Avenida de la Hispanidad y la calle Constitución, "la parte más compleja".
De las Alas ha avanzado a Soyde que esta semana está prevista una reunión con los vecinos para informarles de las novedades.
Obras en marcha
En mayo, se dio comienzo a las obras que han estado activas hasta el 7 de junio durante las cuales, han cambiado cinco válvulas y sustituido la ubicación de otra.
Estas actuaciones garantizarán el perfecto funcionamiento de las válvulas en lo referente a aislamiento y la sectorización de la ciudad, lo que permite que el servicio de agua pueda cortarse por tramos cuando haya algún tipo de avería y no sea necesario dejar a toda la ciudad sin servicio.
Debido a que las dos calles afectadas, la avenida de la Hispanidad y la avenida de España, son dos de las más importantes de la ciudad, las labores se realizarán en horario nocturno para minimizar el daño a la ciudadanía.
"Llevo cuarenta años esperando una solución y no sé si me va a dar tiempo a verlo", clama Manuel y ahora, con la respuesta del Ayuntamiento, puede que sí que esté a tiempo. Puede que los días de Noé hayan terminado.