Lo que se vivió ayer en el Fernando Torres adquirió tintes de épica, y entró directamente en la historia del club kiriko. Bueno, en general, el final de temporada del Fuenla, ha adquirido tintes de épica.
El Fuenla llegaba a la última jornada en puestos de descenso. El llamamiento a la afición resultó un éxito, y el Torres se llenó hasta la bandera, con un ambientazo histórico, no era para menos, el equipo se jugaba la vida contra el Unionistas.
Los nuestros entrarón muy bien en el partido, con las cosas muy claras. Vilán, de nuevo titular, ponía el primer "uy" en boca de los aficionados, con un cabezazo que se marchó al larguero. Unionistas se vió superado por los locales, que con un doble remate de Diego, en el 20 de partido, tras dos buenas jugadas, seguían acercandose al primero de la tarde.
Por momentos, el Unionista consiguió llegar a meta de Cranix, llegaban los cosquilleos y los nervios, pero los nuestros mantenían su puerta a 0. Se acababa el primer tiempo, una buena primera parte del Fuenla, sin premio de gol. Los resultados de los demás partidos nos sonreían, estabamos salvado, de momento...
La primera parte fue un calco de la primera, con un notable sobresalto. El Fuenla comenzaba bien y apretando, con un tiro de Aguirre, que se marchó alto. Pero un golazo imparable de falta de Juanpa, en el 51, silenciaba un Fernando Torres, del que se apoderaba el miedo.
La respuesta de la afición, no se hizo esperar, el estadio volvía a ser una caldera. Llegaba el minuto 63, Barbosa en el córner, Aleix Coch en el área, el resto es historia. Golazo de cabeza Aleix, tras un centro espectacular del 14, que ponía el empate en el marcador, nos volvíamos a salvar, de momento...
El estadio seguía llevando en bolandas al equipo, y en el 74, Barbosa estrellaba un tiro increíble en el larguero. Iba a tocar sufrir de nuevo, pero era el día para hacer historia. En el 77, Aguirre colgaba una falta desde campo propio, que cabeceaba para prolongar Aleix Coch. Allí aparecía Fer Ruiz, para colarse entre los defensas, y empujar el balón al fondo de la red, el Torres estallaba, remontada del Fuenla.
Los últimos minutos se pasaron con un Fuenla que luchaba cada pelota como si fuese la última, la hora se pedía en las gradas, el arbitró pitó. Era una realidad, el Fuenla seguía una año más en Primera RFEF. La fiesta se trasladó al terreno de juego, en una comunión de equipo y grada, que emocionó a todos los presentes.
¡Que partidazo! ¡Que remontada! ¡Enhorabuena equipo y afición, os lo merecéis!