La Plataforma de Personas Afectadas por Corrugados, en Getafe, sostiene que se han detectado partículas procedentes de las emisiones de la fábrica en un colegio de la localidad próximo a sus instalaciones, el Miguel de Cervantes. Miguel Martín, uno de sus portavoces, ha declarado para Televisión Digital de Madrid que este colectivo denuncia "problemas de contaminación acústica, que impide que los vecinos podamos dormir, y también atmosférica, que se extienden desde hace más de 20 años", y habla de "incumplimientos por parte de la Fundición", así como "inacción por parte de las autoridades competentes". Accede al contenido de la entrevista completa dándole al Play.
Hablan de incumplimientos por parte de la Fundición
La Comunidad de Madrid ha declarado para este medio que "los análisis de este tipo de partículas los tienen que hacer técnicos expertos en laboratorios específicos, con muestras periódicas", y ha subrayado que "Corrugados pasa todas las inspecciones que obliga la Ley, y cuando incumple alguna infracción, se le sanciona y se le obliga a corregirlo. Es importante destacar que la fábrica lleva más de 60 años instalada y la construcción de las casas fue posterior". El Ayuntamiento de Getafe indica que "llevamos años pidiendo que la autorización sea más restrictiva para que cumpla con la normativa, y ante la última revisión hemos presentado alegaciones como Ayuntamiento y nos posicionamos claramente con los vecinos, siempre les hemos acompañado a sus manifestaciones y seguimos realizando las gestiones que como Ayuntamiento podemos llevar a cabo".
La empresa, por su parte, también ha destacado en un comunicado que opera "conforme a su Autorización Ambiental, y bajo estrictos controles de la administración competente, desde el año 1963", incorporando "las Mejores Tecnologías Disponibles (MTDs) publicadas por la Unión Europea para el sector siderúrgico, sin utilizar plomo en ninguna de sus formas ni cualquier material susceptible de ser considerado cancerígeno en la fabricación de barras de acero corrugado". Los trabajadores, por otro lado, preguntan "si alguien se ha parado a pensar por qué la plantilla sigue trabajando en esta empresa si estuviéramos expuestos a la contaminación de la que se nos acusa" y piden a las Administraciones "responsabilidad para que no pongan en peligro nuestros puestos de trabajo".