El pasado sábado, agentes de la Policía Local de Getafe y técnicos de la delegación de Sostenibilidad, se personaron en las inmediaciones de Corrugados para constatar la emisión de tres columnas de humo en un periodo aproximado de 10 horas, gracias al aviso vecinal. Los informes técnicos elaborados por esta situación han sido trasladados a la propia empresa, solicitando una explicación y las medidas que tiene planificado adoptar para evitar nuevas molestias a la ciudadanía.
Este episodio es un ejemplo de los incumplimientos que tanto los vecinos como el Ayuntamiento vienen denunciando desde hace años. Corrugados funciona gracias a una Autorización Ambiental Integrada (AAI), que concede la Comunidad de Madrid, única administración competente para controlar y sancionar a la empresa, como ya demostró la Junta de Gobierno local. El Ayuntamiento vuelve a exigir ahora, a raíz de la constatación de nuevos hechos, que el Gobierno regional inspeccione y sanciones a la empresa, así como que informe sobre el resto de expedientes abiertos por emisiones a la atmósfera, aguas, vertidos o la ejecución de las medidas establecidas en el Plan de Minimización de Ruido, que se encuentran sin resolver tras más de cinco años.
Getafe ya alertó en los meses de febrero y marzo de este año, que la Comunidad de Madrid debe modificar de oficio la AAI a Corugados, puesto que esta se concedió sin tener en cuenta aspectos como el control de las emisiones de ruido en el ámbito residencial. Además se ha constatado en informes recientes que tampoco cumple los niveles normativos en el ámbito industrial.
El mantenimiento y la sanación son fundamentales
Por tanto, la empresa Corrugados continúa beneficiándose de una AAI incompleta que le permite realizar su actividad causando indefensión a los vecinos afectados, así como al Ayuntamiento que carece de herramientas para actuar. La AAI es competencia de la Comunidad de Madrid, quien la concede y vigila por su cumplimiento, siendo la norma que permite a Corrugados realizar su actividad; una AAI contra la que el Ayuntamiento viene alegando desde y ya desde 2014 solicitó incluir en la AAI los problemas de ruido en zonas residenciales.