En las reuniones de vecinos de la región las piscinas comunitarias se están convirtiendo en protagonistas. La desescalada en la Comunidad de Madrid está sembrando un mar de dudas en aspectos como la apertura de instalaciones comunitarias y las medidas a tener en cuenta.
Por el momento la regla principal es que las instalaciones deberán limitarse al 30% de su aforo, por lo que, según el modo de gestión de cada comunidad, los vecinos utilizarían las instalaciones uno de cada tres días. Este hecho provoca que para muchos residentes no salga a cuenta abrir su piscina comunitaria.
Desde Colegio de Administradores de Fincas de Madrid (CAFMadrid) calculan un sobrecoste de un 50% de media en la partida correspondiente a la temporada de piscina con respecto al año anterior en las comunidades que abran finalmente estos recintos, debido a la aplicación de las medidas higiénico-sanitarias (son obligatorias las labores de limpieza tres veces al día y de desinfección dos veces diarias) y a la contratación de personal auxiliar.
El CAFMadrid estima que de las 12.000 piscinas comunitarias que existen en la región, cerca de la mitad podrán abrir en estas condiciones (restricción de aforo y mayor gasto).
Nuevas normas y recomendaciones en piscinas
En el caso de optar por abrir nuestra piscina comunitaria, los usuarios deberán cumplir con las medidas higiénico-sanitarias como la desinfección de manos a la entrada y salida del recinto, el uso de papeleras para material desechable y limpieza de calzado a la entrada. También es fundamental seguir cumpliendo con la distancia de seguridad de “al menos” dos metros dentro y fuera de la instalación.
Además de la restricción del aforo (al 30% según Orden ministerial), también debemos tener en cuenta estas normas:
- Los horarios y turnos es importante respetar lo establecido por la comunidad de propietarios y no hacer uso de la instalación durante las labores de limpieza y desinfección.
- El acceso al vaso solo se podrá realizar a través de las escaleras, preferiblemente una de ellas, para facilitar el control siempre que no ocasione aglomeraciones. No se podrá acceder de otra manera (tirándose de cabeza, saltando…) para evitar chapoteos.
- Asimismo, el andén perimetral se utilizará para el acceso y la salida de los usuarios del vaso de la piscina, no pudiendo permanecer en él para otros fines.
- Los objetos personales, incluida la toalla, deberán permanecer dentro del perímetro de seguridad, no estando permitido el uso de colchonetas, balones…, ni accesorios o elementos que generen chapoteos.
- No se podrán utilizar las duchas de los vestuarios, siendo preferible ducharse en casa.
En cuanto a las recomendaciones para la seguridad de los usuarios, se insiste en el uso de mascarilla aun cuando se respete la distancia de seguridad. Además, se aconseja la utilización de gafas para el baño, incluyendo las que protegen las fosas nasales o máscaras de buceo.
Piscinas hinchables ¿la solución?
Dada la incertidumbre de la apertura de las piscinas públicas y privadas, desde CAFMadrid alertan de la proliferación de piscinas desmontables en terrazas, aun cuando supone un riesgo para los vecinos ya que el edificio no está diseñado para que el forjado soporte el peso de estas instalaciones.
Antes de instalar una piscina de estas características, “el propietario debe encargar un estudio firmado por un técnico competente, en el que se garantice la correcta instalación. También sería muy aconsejable contratar un seguro de responsabilidad civil que cubra posibles accidentes o daños”, recomiendan desde CAFMadrid.