El Pleno del Ayuntamiento de Madrid, en su sesión ordinaria de septiembre, ha aprobado la modificación del plan general que afecta al ámbito ‘Parque Metro Cuatro Caminos’. La iniciativa ha salido adelante con el voto a favor de los grupos municipales del PP y VOX, y con los votos en contra de los grupos de Más Madrid y PSOE. Con esta ratificación definitiva, el Área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad del consistorio, dirigida por Borja Carabante, da respuesta a la situación de 443 familias que llevan años esperando para tener sus viviendas.
Ubicado sobre el suelo de las antiguas cocheras del suburbano, el proyecto permitirá recuperar para la ciudad un enclave próximo a Cuatro Caminos con gran potencial urbanístico. Su transformación será integral, mediante la construcción de viviendas, oficinas y aparcamientos, junto a la apertura de nuevas zonas verdes y espacios públicos.
Durante la sesión plenaria, Carabante ha destacado que, “con esta modificación, se hace justicia a las 443 familias que llevan 10 años esperando para poder acceder a sus viviendas”.
Así, este plan cumple con diferentes objetivos; entre ellos, ha mencionado el delegado, “permite la recuperación de un enclave urbano y emblemático, la transformación necesaria del espacio público, soterrando definitivamente las cocheras de Cuatro Caminos, así como la regeneración urbana con nuevas zonas estanciales y zonas verdes para el disfrute de los vecinos”.
Carabante ha destacado, por otro lado, que se ha producido una colaboración entre la Comunidad de Madrid y el ayuntamiento para poder sacar adelante el expediente y dar respuesta a los cooperativistas. Asimismo, el documento será remitido a la Comunidad de Madrid para su aprobación definitiva.
Los nuevos usos residenciales y terciarios quedarán ordenados en torno a una gran zona verde central. El subsuelo ubicado bajo ella tendrá uso dotacional de transporte ferroviario, para el mantenimiento de las cocheras de Metro. Además, las zonas verdes y espacios libres públicos de nueva creación ocuparán más de 9.400 metros cuadrados.
Da respuesta a 443 familias que llevan años esperando por sus viviendas
Con esto, la actuación afecta a una superficie de 43.250 metros cuadrados y la superficie edificable asciende a una longitud de 59.586. Un 10% de la edificabilidad residencial estará destinada a vivienda sujeta a un régimen de protección pública, de forma que, de las seis parcelas dedicadas al uso residencial, cinco serán de vivienda libre y una de vivienda protegida. Completan el ámbito dos parcelas dedicadas a oficinas y una destinada al uso de la administración pública.
A su vez, el ayuntamiento recibirá, fruto de este plan, una cesión de 5.485 metros cuadrados de edificabilidad de uso residencial y 472 de terciario. El ámbito contará con una dotación mínima de 1.050 plazas de aparcamiento, de las que 949 corresponderán al uso residencial y de oficinas. Además, el futuro edificio del Ayuntamiento de Madrid contará con otras 101 plazas.
Las actuaciones previstas en el proyecto afectan a dos zonas diferenciadas. La primera, con una superficie de 38.564 metros cuadrados, está ubicada en el terreno de las antiguas instalaciones de Metro. Será en este espacio en el que se materializará la nueva edificabilidad. La segunda zona se corresponde con las dos porciones de manzanas residenciales consolidadas (que ahora serán cerradas definitivamente) y al tramo de la calle de Esquilache, con una superficie total de 4.690 metros cuadrados.
También, se mejora la conexión urbana a través de tres actuaciones: se completará la calle de Esquilache para conectar la calle de Ramiro II con la avenida de la Reina Victoria; se abrirá un viario público de conexión entre la calle de Bravo Murillo, de Esquilache y la avenida de Pablo Iglesias, y se prolongará la calle de Virgen de Nieva para conectar Bravo Murillo con Esquilache.
De esta forma, el ámbito está ubicado dentro del entorno del Bien de Interés Cultural (BIC) declarado en la categoría de Conjunto Histórico ‘Recinto de la Villa de Madrid’. Para la redacción de esta iniciativa, se ha tenido en cuenta la protección de dos edificios de la calle Esquilache (números 7 y 12), además del plan especial que afecta a la parcela del colegio El Porvenir (calle de Bravo Murillo, 85) con la finalidad de mejorar la calidad ambiental de todo el conjunto urbano y, en concreto, la visualización de la capilla del colegio desde los espacios públicos.
Igualmente, se ha propuesto la catalogación de tres elementos a partir de los dictámenes de las comisiones con competencia para la protección del patrimonio: la embocadura del antiguo túnel de metro que servía de acceso a las vías de las líneas 1 y 2, el cierre de la Casa Tuduri y el muro lateral de las cocheras.