Familiares, residentes y trabajadores de una residencia de ancianos en el madrileño distrito de Usera alzan la voz. Aunando fuerzas denuncian la falta de mantenimiento y severas deficiencias con las que cuenta el edificio que origina continuos problemas. El último, la rotura de unas tuberías que, según recoge TeleMadrid, les han dejado varios días sin calefacción y sin agua caliente. Algo que, desde la dirección del centro de titularidad pública pero gestionado por un fondo de inversión, niegan con rotundidad chocando de frente con la versión ofrecida por los usuarios.
Familiares y usuarios se sienten hastiados e indignados tras “muchos años” denunciando estas irregularidades. "Ha llegado el colmo con la rotura de las tuberías. Tienen tres ascensores y solo funciona uno, llevan así tres meses. Cada dos por tres cambian de médicos, no se da la medicación a su debido tiempo, no se limpia, falta personal y no da tiempo a hacer su trabajo", recogía el citado medio.
Esta empresa quiere ahorrarse dinero y lo hace recortando presupuesto, no se da una buena calidad de servicio
Parches en lugar de soluciones
Trabajadores del comité de la empresa subrayan la falta de personal como un problema que arrastran desde hace mucho tiempo: “esta empresa quiere ahorrarse dinero y lo hace recortando presupuesto, no se da una buena calidad de servicio. Es una residencia de titularidad pública que la gestiona una empresa privada. Este tipo de empresas a lo que se dedican es a sacar el máximo rendimiento y eso lo pagan los abuelos porque no se merecen esta calidad de vida", reconocen.
Las denuncias ante el Ejecutivo regional y la inspección de trabajo han sido continuas en los últimos tiempos; sin embargo, parece que la pasividad ante el centro ubicado en la calle Cristo de la Victoria se ha asentado entre quienes deberían tomar medidas al respecto.