Por la cooperación y coordinación entre los especialistas dedicados a la lucha contra la explotación sexual de menores en internet e identificación de víctimas, comenzaron las investigaciones policiales a principios del año 2020.
El Servicio de Policía de Australia localizaron la distribución de material de explotación sexual de menores en los foros de la Red Tor.
Después de recibir el material, que constaba de una gran cantidad de fotografías y vídeos mostrando a varios menores siendo víctimas de explotación sexual, la Policía Nacional consiguió identificar los lugares en los que se pudo haber originado todo el material. Con el avance de la investigación pudieron identificar uno de los lugares en los que se habría grabado planteándoselos la hipótesis de que se tratara de un centro educativo ubicado en Madrid.
Cuando localizaron el centro, los agentes analizaron al personal que trabajaba allí contrastando con la información del supuesto terminal telefónico, que contaba con un sistema operativo inglés.
Al sospechar de que podía ser un profesor del centro indagaron en los antecedentes de todos los docentes para localizar la posible falsificación de identidad por parte del verdadero autor. Finalmente, lograron especificar en un profesor de nacionalidad inglesa, el cual se había cambiado la identidad como sospechaban los agentes. Además, ya tenía antecedentes en Reino Unido con hechos parecidos a los investigados.
Al localizar al sospechoso pidieron la autorización judicial para poder llevar el registro en su domicilio. En este registro se detecto que utilizaba distintas anonimizadores y técnicas de encriptación que impedían el acceso al contenido que tenía en los dispositivos que se encontraron en us domicilio. A pesar de los impedimentos consiguieron localizar algunos archivos que dieron origen a la investigación.
En el registro también se localizaron varios documentos falsificados, los cuales empleaba el detenido para conseguir entrar a España y poder conseguir un empleo con un nombre diferente al verdadero.