La pandemia de COVID-19 está causando un número rápidamente creciente de patologías de SARS-CoV-2 en todo el mundo, con una neumonía grave como resultado común y a menudo mortal.
Por norma general, en los hospitales se utiliza un ventilador mecánico automatizado para bombear oxígeno a los pulmones y luego para eliminar el dióxido de carbono mientras el paciente respira. Son máquinas caras con diseños propietarios y controles complejos.
De esta necesidad surge Mechanical Ventilator Milano, un respirador que sólo requiere oxígeno (o aire medicinal) y electricidad y puede ser operado con instrucciones simples. El objetivo de la colaboración MVM es diseñar, desarrollar, construir y certificar un ventilador seguro que sea potente, pero suave, para los pulmones.
Actualmente, una plataforma internacional de más de 150 científicos e ingenieros de España, Italia, Francia, Canadá y Estados Unidos ha desarrollado el ventilador MVM, como solución para tratar a los pacientes con coronavirus en UCI. Dentro del consorcio español se encuentra el Servicio de Neumología del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz (FJD) de Madrid, que colabora activamente en el proyecto junto a otras nueve entidades españolas.
El 1 de mayo, la Agencia del Medicamento Estadounidense (FDA) autorizó su uso en los enfermos y ya han contribuido una decena de entidades españolas al proyecto: la Fundación Jiménez Díaz de Madrid, el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Ciemat), el Laboratorio Subterráneo de Canfranc, el Centro de Astropartículas y Física de Altas Energías (CAPA, Universidad de Zaragoza), la Universidad Politécnica de Madrid, el Instituto de Investigación Sanitaria de Aragón, la Fundación Aragón para la Investigación y el Desarrollo (ARAID), la Universidad Católica de Valencia, así como médicos de Eliance Helicopters y del Servicio de UCI del Hospital General San Jorge (Huesca).