La juventud no está reñida con el talento ni el éxito. Iván Rico es todo un ejemplo. Su proyecto ‘Will & Charlie’ destrona la absurda falacia de que la inexperiencia está ligada a la edad.
Este madrileño, de apenas 22 años, y estudiante de la URJC, se presenta vivaz, aunque tímido, en bicicleta a un encuentro en el que la pasión y la inspiración coparon una conversación donde Iván nos descubrió su predilección por el ecodiseño. No pierdan de vista a este fuenlabreño, porque ya ha ganado un Premio Nacional y ha expuesto sus trabajos en importantes salas de Madrid, como Matadero.
Iván nos muestra el envoltorio de `Wil & Charlie´. Una bolsa biodegradable
Vidas infinitas
“Gracias al ecodiseño me di cuenta de lo fácil que era producir respetando el medio ambiente”. Pese a las innumerables ventajas, su desarrollo se encuentra con grandes obstáculos. “A las empresas no les interesa producir de una manera sostenible”.
Precisamente es sostenibilidad lo que promete el ecodiseño, ahorrar recursos y aminorar el impacto en el entorno, tanto en el proceso de producción como en el final de la vida útil del producto. Los proyectos que Iván imagina, y a los que da forma, están pensandos para contar con vidas infinitas “aunque la producción en un principio sea más costosa que mediante el método tradicional, a largo plazo se ahorran recursos, convirtiéndose en una inversión”, nos explica.
Gracias al ecodiseño me di cuenta de lo fácil que era producir respetando el medio ambiente
Cosechando éxitos
Su innovadora visión le ha catapultado a la primera línea del diseño de producto. Entre sus éxitos destaca el Premio Nacional por su expediente académico y su ecodiseño ‘Will & Charlie’ en la rama de Modelismo Industrial.
Una foca y una ballena pensadas para facilitar el día a día de personas con problemas de movilidad. “Me fijé en mi tío, que presenta este tipo de dificultades, y en lo mucho que le costaba hacer algo tan sencillo como abrir una botella”. ‘Will & Charlie’ se sirven de su peculiar diseño para abrir envases como tarros, botellas de rosca, chapas y latas. Una ayuda que “en algún momento, a todos nos viene bien”, insiste.
Su ecodiseño fue expuesto en Matadero (Madrid)
No es el único reconocimiento que ha logrado por su originalidad. También se ha hecho con el Premio Extraordinario de Artes Plásticas y Diseño de la Comunidad de Madrid, donde dio un discurso emotivo y lleno de agradecimiento a todos aquellos que le han acompañado durante su etapa académica. Aún con mucho camino por recorrer, Iván Rico nos regala su mejor consejo: “Hay que aprovechar cada oportunidad. A los diseñadores nos debe mover la pasión, no el dinero”.