No todo son subidas con la entrada del nuevo año. 2019 ha llegado cargado de aumentos en lo relacionado con el precio, por ejemplo, de la luz, pero, en cambio, se ha reducido en otros ámbitos como pueden ser los transportes.
El Gobierno central aprobaba, en el pasado mes de diciembre, la gratuidad de las vías de peaje rescatadas, una medida que afecta, de manera directa, a los vecinos y vecinas de municipios del sur de Madrid.
Sobre todo, teniendo en cuenta que, entre esas carreteras, se encuentra la R-5, que une Navalcarnero con Carabanchel y que pasa por diversas localidades como Arroyomolinos, Moraleja de Enmedio, Móstoles, Leganés, Alcorcón o Fuenlabrada.
La autovía de peaje es, desde el 15 de enero, gratuita en su horario nocturno (entre las 00:00 y las 06:00 horas), además de rebajar su precio en el resto del horario en un 30%. Una bajada importante que permitirá el trasiego de un mayor número de vehículos.
La R-5 pasa por diversas localidades como Arroyomolinos, Moraleja de Enmedio, Móstoles, Leganés, Alcorcón o Fuenlabrada
Reflotar el tráfico
De hecho, ese es el principal objetivo del Gobierno: reflotar el tráfico en unas vías que, al carecer de ello, se han visto arrastradas a la quiebra. Junto a la R-5, tanto la reducción de las tarifas como la gratuidad del horario nocturno se verán reflejados en la R-2, la R-3, la R-4, la M-12, la AP-7 y la AP-36.
Dentro de este tipo de vías, también habrá que sumar, próximamente, a la AP-41 (carretera de pago que une Madrid y Toledo), que, actualmente, depende de la gestión privada. Sin embargo, en los próximos meses pasará a ser responsabilidad pública a través de la Sociedad Estatal de Infraestructuras del Transporte Terrestre (SEITT), por lo que también se beneficiará de las rebajas económicas del resto de carreteras de peaje.
Una nueva alternativa para los vecinos y vecinas que utilizan, a diario, las carreteras madrileñas.