Cerca de 27.000 mujeres marcharon en Madrid ayer 8 de marzo, por el Día Internacional de la Mujer, según los datos aportados por la Delegación del Gobierno. Sin embargo, lo han hecho de forma separada, en dos marchas por el movimiento feminista y la mujer, pero con ideologías y manifiestos diferentes.
A gritos de "no es no y lo demás es violación", la manifestación de la Comisión 8M Madrid liderada por Ana Hernando, ha llamado al Gobierno a "no dar un paso atrás sobre el consentimiento" y ha hecho también referencia a la actualidad política con temas como la Ley del "solo sí es sí" o la Ley Trans, estando ambas muy presentes durante la manifestación.
Por otro lado, la manifestación del Movimiento Feminista de Madrid, liderada por Ana de Blas, ha seguido otro recorrido y empuñado pancartas con revindicaciones muy diferentes a las de la Comisión 8M, ha arrancado en la Plaza del Emperador Carlos V, recorriendo toda la calle Atocha a grito de "El feminismo es abolicionista", "Ser mujer no es un sentimiento" o "Irene dimisión."
Con gritos de 'Irene dimisión' han marchado las mujeres convocadas convocada por el Movimiento Feminista de Madrid y de 'Ni un paso atrás en el consentimiento', en la organizada por la Comisión 8M
En cualquier caso, hay que hacer mención también a la guerra de cifras que se está dando entre, por un lado, la Comisión 8M Madrid, que cifra la asistencia en 700.000 personas y los datos ofrecidos por el Gobierno, de los que se desprende una caída estrepitosa en la participación respecto a años previos a la pandemia. Si tenemos en cuenta los datos registrados en 2018 y 2019, los datos cifran en cerca de 300.000 las personas que se manifestaron, lo que significa una caída de 273.000 personas.