La cultura al alcance de todos. Ese es el mantra que ha guiado al Teatro Real de Madrid y al Hospital 12 de Octubre para firmar un acuerdo por el que fomentan, con un pequeño gesto, pero enorme voluntad, la divulgación de la música y el arte, especialmente entre los más pequeños, y en lugares donde más necesario es tenerla presente, como es el caso de este centro sanitario madrileño.
De esta forma, las citas operísticas, conciertos y espectáculos enfocados al público infantil que tengan lugar en el Teatro Real serán retransmitidos en el centro. Lo harán así durante tres años, prorrogables, y, con ello, pretenden ayudar a pacientes y familiares a disfrutar de momentos de ocio que les permitan evadirse de su rutina y les sirvan de apoyo emocional.
El acuerdo, explican ambas entidades, presta especial atención al área infantil (donde, además, se van a llevar a cabo distintas acciones culturales) porque, con él, se pretende que la música "suponga un apoyo en el desarrollo y recuperación de los niños y adolescentes" ingresados en el hospital.
Ambas entidades buscan que la música suponga un apoyo en el desarrollo y recuperación de los niños y adolescentes ingresados en el hospital
La propuesta se suma a las ya llevadas a cabo por el Teatro Real, como su Programa Social, un espacio de integración de menores con diferentes perfiles a través del aprendizaje y la práctica musical. Por su parte, el Hospital 12 de Octubre ha venido desarrollando, desde hace tiempo, una estrategia para que la atención a los pacientes sea, cada día, más amable y cercana.
Algunas de las retransmisiones tuvieron lugar hace unos meses, concretamente el pasado 22 de noviembre, coincidiendo con el Día de la Música, en el que se ofreció una actividad destinada a los pacientes pediátricos. Fue el caso de 'Mi madre la Oca', basada en la obra original de Maurice Ravel e inspirada en algunos de los cuentos más conocidos de la literatura francesa, como son 'La bella durmiente' o 'Pulgarcito'.