Las residencias de la comunidad de Madrid tienen 215 puestos vacantes. Los familiares de los residentes denuncian que esta situación se da tanto en la residencias públicas como en las privadas. Este sector, que cada vez avanza más por el envejecimiento de la población, es un sector muy sensible. La situación ha llegado a un punto, según informa El País, en el que han muerto varias personas por, según denuncian los familiares, falta de personal. Tres fueron los fallecidos debido a esta causa, uno en la residencia AMAS de Arganda del Rey y otros dos en Alcorcón. Los familiares de los fallecidos denunciaron que la muerte se produjo por negligencias vinculadas a la falta de personal. Según denuncia el portavoz de los familiares, Luis Miguel, “en Alcorcón la cosa sigue peor; no hay personal ni los fines de semana, ni festivos, ni noches. En el caso en el que los residentes se pongan malos, los mandan a urgencias, lo que provoca colapsos; además los ancianos están en las zonas comunes de la residencia sin supervisión”.
Según un informe pedido por el PSOE al Gobierno Regional, las plazas vacantes afectan a todos los profesionales necesarios en una residencia: enfermero, conductores y cocineros. Alrededor de un tercio es personal de cuidados. Faltan 54 auxiliares de enfermería, 47 auxiliares de servicio y 19 enfermeros. La consejería de Políticas sociales, gestionada por Ciudadanos declara que es “un problema heredado y que las cifras de vacantes se generaron sobre la legislatura pasada, cuando la región estaba gestionada por el PP únicamente”.
La oposición denuncia que esta situación no se soluciona por falta de voluntad y lentitud burocrática. Además, se suman las pésimas condiciones en las que están los trabajadores de las AMAS. El sindicato de enfermería madrileña (SATSE) explica que muchos enfermeros tienen las residencias como última opción, debido al estrés de trabajo que generan y las condiciones de las que carecen que en otros sitios sí las disfrutan. Según el Defensor del Pueblo, muchas familias alegan que las residencias han perdido mucha calidad en la atención, debido a la escasez de personal.
Según denuncian los afectados, sus familiares murieron por neglicencias de falta de atención
Lentitud Burocrática
El problema también se ve agravado por la lentitud a la hora de que los trabajadores se incorporen a sus puestos; las vacantes del verano pasado no se cubrieron hasta noviembre/diciembre. La Gran Residencia del distrito de Carabanchel, denuncio en marzo del año pasado esta situación; además esperaban a un terapeuta ocupacional que nunca llegó, aunque declaran que no es únicamente allí, si no que las residencias todavía esperan las llegadas de este tipo de refuerzos. Las residencias de Madrid tienen que tener una ratio de personal fijo por ley, aunque los familiares denuncian que en la práctica esto no se cumple. Los turnos que carecen de personal son: el de noche, tarde y fines de semana. Las vacaciones de verano de estos trabajadores no han sido cubiertas. Según el presidente de la Plataforma por la Dignidad de las Personas Mayores, Miguel Vázquez, ha habido residencias que se han quedado sin sala de fisioterapia, terapia ocupacional o incluso sin médico durante todo el mes de agosto.