El mismo día de la segunda fase de la operación salida, tres drones han despegado con una novedad, ahora estos dispositivos están capacitados para impartir sanciones.
La DGT prevé 2,9 millones de desplazamientos hasta el sábado. Los drones realizarán labores de vigilancia, control y gestión del tráfico en las carreteras. La infracción captada por drones podrá ser notificada en el acto por un agente de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil (ATGC) o ser tramitada posteriormente por las autoridades competentes. Todas ellas, dispondrán del fotograma correspondiente con la evidencia de la infracción cometida por el conductor.
Actualmente la Dirección General de Tráfico cuenta con 11 drones, 3 de ellos certificados por el Centro Español de Metrología (CEM), que son los que van a comenzar a denunciar. Los 8 restantes seguirán utilizándose para la regulación y gestión del tráfico.
Sobre los drones de la DGT
Los tres drones operaron en abril, sobre las autovías A-1 y A-6 en la provincia de Madrid y sobre la A-6 a la altura de la Tordesillas (Valladolid). Registraban todo tipo de infracciones (excepto excesos de velocidad) de vehículos en las carreteras.
Estas pequeñas aeronaves, teledirigidas desde tierra por operadores específicamente formados, vienen a completar las labores de vigilancia que realiza la flota de helicópteros de la DGT sobre más de 160.000 kilómetros de carreteras en el territorio nacional.
La altitud operativa estos drones es de hasta 120 metros, tienen una autonomía de 20 minutos, un radio de acción de 500 metros y equipan cámaras de alta definición con un alcance de visión de hasta 7 kilómetros.
Otras medidas de control de tráfico
Para esta segunda fase del dispositivo especial de Tráfico han entrado en funcionamiento otros 8 nuevos radares, todos ellos en carreteras convencionales, 6 de los cuales son de tramo.
Desde el 1 de julio han comenzado a operar 20 nuevos radares, que se suman a las tareas de vigilancia de los ya existentes, junto a los 12 helicópteros y 11 drones que dispone la DGT. Además de los radares, se incrementarán los controles preventivos de alcoholemia, hasta alcanzar los 900.000 controles.