Madrid redobla esfuerzos en plena pandemia. El Gobierno regional intensifica sus actuaciones en materia de empleo, especialmente para los sectores más vulnerables. La Comunidad de Madrid ha aprobado un gasto de 2,5 millones para financiar parte del coste de las Unidades de Apoyo que prestan servicios en los Centros Especiales de Empleo (CEE) de la región. Estas ayudas sirven para subvencionar los costes laborales y de la Seguridad Social a cargo de la empresa respecto a los trabajadores con contrato indefinido que forman parte de estas unidades, que son equipos formados por psicólogos, educadores sociales, psicopedagogos o monitores especializados.
Prestan servicio a los CEE acompañando a los trabajadores con discapacidad de su desempeño laboral, atendiendo su aprendizaje y evaluando las necesidades de estos trabajadores con el resto de componentes.
La subvención se concreta en un importe fijo anual de 1.200 euros por cada persona trabajadora con discapacidad severa a tiempo completo, bien con un contrato indefinido o con un contrato temporal de duración igual o superior a seis meses.
La Comunidad de Madrid cuenta con 219 Centros Especiales de Empleo, que dan trabajo a casi 17.000 personas con discapacidad
El papel “fundamental” de los CEE
La intervención de las Unidades de Apoyo a los CEE está resultando fundamental para amortiguar los efectos que la crisis sanitaria está produciendo en colectivos vulnerables, como las personas con discapacidad psíquica o enfermedad mental, que han visto notablemente alteradas sus condiciones de trabajo y sus pautas de vida. La convocatoria de ayudas de 2019 estaba dotada igualmente con 2.500.000 euros y permitió que 299 monitores y técnicos de las Unidades de Apoyo atendieran a 2.804 trabajadores con discapacidades severas.
La Comunidad de Madrid cuenta con 219 Centros Especiales de Empleo, que dan trabajo a casi 17.000 personas con discapacidad. Dentro de este colectivo, 7.198 tienen discapacidades severas, predominando las personas con discapacidades psíquicas (5.646), seguido por 838 personas con discapacidades físicas con un grado igual o superior al 65% y las personas con discapacidades severas de tipo sensorial, que ascienden a 714 trabajadores.