Ayer, Marca publicaba un reportaje rememorando la trayectoria de Victoria Hernández: su huella. Así, la madrileña, nacida en 1958, se trató de la primera futbolista profesional en nuestro país que firmó un contrato, en 1971.
Con apenas 12 años, la joven de Villaverde comenzaba su andadura futbolística con el club Olímpico Villaverde, por 4.000 pesetas con un plus de 250 por partido ganado. Así, la concejala de Más Madrid por el distrito, Carolina Pulido, destacaba la "deuda pendiente" que éste y "toda la ciudad de Madrid" tiene con ella y con otros atletas como Rafael Muga que "hicieron posible la gesta del Olímpico Villaverde".
Así, en el Pleno del distrito de hoy la concejala presentará una propuesta para cambiar el nombre de la Instalación Deportiva Basílica El Espinillo II por el de Victoria Fernández y poner una placa en recuerdo a Muga y al Olímpico.
Fueron años muy bonitos, pero también muy duros. El fútbol femenino no estaba bien visto y nosotras jugábamos porque nos apasionaba este deporte - Victoria
"Victoria es una figura no reconocida, una vecina muy implicada en el barrio y una mujer que siempre ha intentado visibilizar a la mujer en el deporte. Llevamos la propuesta al Pleno con convencimiento de que va a ser aprobada, pero queremos que sea con un consenso unánime porque la protagonista y el contexto lo merece", sostiene Carolina.
Victoria acabó colgando las botas a los 39 años tras muchos años ofreciendo su valentía y calidad en el terreno de juego en un momento donde el futbol femenino "no estaba bien visto", tal y como apunta Victoria a Marca.
Para ella, la noticia ha sido toda una sorpresa y confiesa que, en un principio, pensaba que se trataba de "una broma". Sin embargo, ha querido destacar la enorme ilusión que le supone ya que "dejar huella de esta forma era algo inimaginable cuando empecé a jugar al fútbol y que hoy en día me hace feliz", subraya.