El Ayuntamiento de Madrid ha finalizado los trabajos de reurbanización y accesibilidad de un espacio interbloque situado en el barrio de Ventas (Ciudad Lineal). El Área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, que dirige Borja Carabante, ha invertido casi 650.000 euros en este punto de La Elipa, situado entre las calles Santa Felicidad y María Teresa Sáenz de Heredia. Los trabajos han permitido dotar a esta parcela de arbolado y jardines además de áreas que han sido renovadas por completo para los vecinos.
Carabante ha visitado este espacio, ubicado entre edificaciones residenciales de los años 60 y equipamientos de los 70, acompañado por la concejala del distrito de Ciudad Lineal, Nadia Álvarez, y ambos han podido comprobar el resultado de las actuaciones. Con ellas, los vecinos podrán disfrutar de un terreno que se encontraba sin uso y sin urbanizar y ahora ha sido transformado en un espacio conector y estancial. Los trabajos de reurbanización y accesibilidad, desarrollados durante cinco meses, han afectado a una superficie de 3.426 m2. Uno de los elementos principales de su transformación ha sido la creación de nuevas zonas ajardinadas con la plantación de 66 árboles y 5.740 arbustos.
Los trabajos de reurbanización y accesibilidad, desarrollados durante cinco meses, han afectado a 3.426 m2, que cuentan ahora con área infantil y para mayores
La intervención del espacio central ha supuesto la ejecución de un camino articulado en forma de diagonal. Este recorrido divide el espacio en cuatro zonas: una soleada, convertida en área estancial vegetada; una de sombra, resuelta como un área de juegos y estancial infantil-juvenil-adulta; un espacio abierto con elementos para el ejercicio físico de mayores, y una zona arbolada pensada para juegos de mesa. De esta forma los vecinos recuperan un total de 428 m2 para áreas estanciales, 233 de zona de juegos infantiles y 83 para el área dedicada a los mayores.
Accesibilidad universal
Las obras han incluido el acondicionamiento del acceso desde la calle Santa Felicidad hasta la calle María Teresa Sáenz de Heredia, así como la renovación de las aceras perimetrales. Todo ello ha posibilitado los actuales itinerarios peatonales accesibles. En las calles adyacentes se ha realizado la adecuación y mejora de las aceras pavimentadas de los bloques vecinales colindantes para garantizar la accesibilidad universal, ya que se encontraban en un estado de importante degradación.
Las actuaciones también han incluido la excavación y saneo de la parcela para su puesta a cota, la ejecución de los caminos de acceso, la implantación de una red de drenaje de aguas pluviales, una nueva red de alumbrado público, la instalación de una red de riego automática, plantaciones y colocación de mobiliario urbano relativo a las zonas de juegos infantiles para diferentes edades y de elementos de mayores.