La Junta de Gobierno ha dado luz verde al envío del borrador inicial de la nueva estrategia de Residuos Madrid 2030 a la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Agricultura de la Comunidad para ser sometido a un procedimiento de Evaluación Ambiental Estratégica. A partir de este momento, se inician los trámites preceptivos para el análisis de los impactos ambientales del documento, así como de participación e información pública.
Es imprescindible cumplir en forma, ya que la anterior estrategia en relación con los residuos, aprobada en 2019, fue declarada nula de pleno derecho en los tribunales al no haberse cumplido con los procedimientos correspondientes. El modelo de gestión que va a ser adoptado tras la evaluación ambiental se asegura que será "el más eficiente", apuntan desde el Ayuntamiento.
En 2021, se generaron en Madrid 1.369.923 toneladas de residuos domésticos; 1.243.194 toneladas se trataron en el Parque Tecnológico de Valdemingómez (PTV), mientras que 114.964 se gestionaron en otras instalaciones.
Para cumplir con las diferentes normativas y objetivos europeos, estatales y autonómicos, la nueva Estrategia de Residuos persigue el reto de gestionarlos mediante la aplicación de los principios propios de la economía circular y la jerarquía de residuos, maximizando el tiempo que los recursos que contienen los residuos se mantienen en el proceso productivo
Teniendo en cuenta las últimas noticias sobre Valdemingómez, los objetivos que se han propuesto para la Estrategia se tornan urgentes y necesarios: maximizar la transformación de residuos en nuevos recursos, lograr el cumplimiento de la normativa vigente y, por último, disminuir el impacto sobre la salud humana y el medio ambiente con énfasis en los gases de efecto invernadero y sustancias odoríferas.
En Madrid, se recogen cada año de forma selectiva fracciones de biorresiduos generados en los hogares y comercios, envases, papel-cartón, vidrio, textil o aceite usado, además de llevar a cabo recogidas separadas específicas como muebles y enseres, residuos de aparatos eléctricos y electrónicos. La materia orgánica representa la categoría con mayor porcentaje en términos cuantitativos, el 38 % del total, que junto con las fracciones de siega, poda y hojas que también se recogen de forma separada (5,2 %), aumenta hasta un 43,2 %. También son notables las fracciones de envases, papel-cartón y vidrio que componen un 18,1 %, 13,3 % y 10,6 % de la recogida selectiva, respectivamente. En conjunto, estas cinco fracciones forman un 85,3 % de la recogida separada del municipio.