La pandemia del coronavirus ha agravado la situación de este servicio en nuestra comunidad y ha dejado ver los profundos cambios que se deben hacer para mejorar la asistencia. Además, los sindicatos han puesto de manifiesto la necesidad de trabajar en sistemas de mejora del descanso de los profesionales y de su conciliación laboral y familiar. 

Este nuevo Plan incluye medidas orientadas a mejorar las condiciones laborales y retributivas de sus profesionales, así como aspectos relacionados con la organización de la actividad que reorienten y flexibilicen los recursos, como la gestión compartida de la demanda o la revisión de puestos de trabajo para su posible adaptación a escenarios de teletrabajo.

En el Servicio Madrileño de Salud, se está trabajando en este Plan de Mejora Integral en Atención Primaria que contará con casi 83 millones de euros para reorganizarla. De esta cantidad, 35,9 millones se destinará al incremento retributivo de los facultativos de la Primaria; 10,6 millones se invertirán en puestos de difícil cobertura; 2,5 millones en la modificación del modelo de abono de la tarjeta sanitaria de enfermería, adaptándola al modelo de médicos de familia y pediatras. 

Además, se compensará el esfuerzo de los profesionales que asuman la cobertura de las ausencias autorizadas sin cubrir de las categorías profesionales con mayor dificultad de contratación por realizar una actividad complementaria de 4 horas adicionales a la jornada habitual con 200 euros para médicos de familia y 128 para enfermeras, siempre que no haya suplente. En este capítulo, se realizará una inversión de 9,4 millones de euros. 

A la falta de recursos humanos, la Consejería de Sanidad ha consensuado en la Mesa Sectorial de Sanidad con los representantes sindicales la adecuación de las plantillas con el objetivo de aumentar el tiempo de consulta y reducir los ratios de tarjeta sanitaria por profesional, creándose así 571 plazas. De estas, 150 se crearán este año, 265 en 2021 y 156 en 2022. Se invertirán 24,3 millones en esta medida.

MEDIDAS ORGANIZATIVAS

Para la Gestión Compartida de la Demanda, se han creado cuatro grupos en los que se realizarán cuatro líneas de trabajo que permitirán atender la demanda asistencial de los ciudadanos, fortaleciendo la complementariedad existente entre los roles profesionales. Se realizará, pues, una protocolización de la entrada del ciudadano al sistema, un desarrollo de la consulta no presencial, la identificación de procesos asistenciales y no asistenciales demandados por el ciudadano susceptibles de reorientación y la información a la población de los recursos disponibles en el centro de salud, profesionales y competencias.  

Por último, se pretende por medio de este plan flexibilizar los turnos bisagra y deslizantes, consensuados e implementados desde hace varios años en los centros de salud. Estos han sido recursos organizativos válidos para mantener la accesibilidad en un entorno de carencia de suplentes, sobre todo en los casos de cobertura de los permisos de reducción de jornada por guarda legal. Así, se promueve la complementariedad de los profesionales, se potencia el desarrollo de sus competencias y se refuerza la autonomía de gestión de centro. 

Como ha podido saber Soyde., la Consejería de Sanidad ha realizado 9.347 contratos de refuerzo de momento hasta el 31 de diciembre, y este verano se han realizado otras 5.398, principalmente de enfermería, técnicos de enfermería y celadores, de las cuales ya está activada la renovación de todas las enfermeras (más de 1.000) también hasta el 31 de diciembre. Hasta esa fecha, hay ya 10.400 contratos de refuerzo.

HOSPITAL DE CAMPAÑA DE IFEMA E ISABEL ZENDAL

Además de la AP, la Comunidad de Madrid plantea un rearme sanitario que dote de recursos humanos a los dos hospitales de repuesto: IFEMA y el Hospital de Emergencias Isabel Zendal. Como han indicado fuentes de la Consejería de Sanidad a Soyde., en el Isabel Zendal “se van a activar unidades multidisciplinares desde los hospitales mediante un proceso negociado, pero evidentemente retribuido, a través de un proceso de movilidad voluntario”. 

Así pues, se reforzará el hospital e IFEMA con todas las contrataciones que sea posible para dotar de personal estatuario a ambos centros. En IFEMA, la pasada oleada se atendió a 4.000 pacientes en los momentos más duros. El objetivo de la Consejería es que haya personal sanitario con experiencia en la atención de la covid-19 en ambos centros.