La Junta de Gobierno ha aprobado hoy realizar una consulta ciudadana previa a la modificación de la Ordenanza Reguladora del Taxi. Con esta iniciativa, como ha explicado la vicealcaldesa de Madrid y alcaldesa en funciones, Inma Sanz, el Ayuntamiento pretende identificar y recoger ideas que permitan potenciar la sostenibilidad, relevancia y utilidad social del servicio. Se trata de ofrecer una respuesta real a las necesidades de los ciudadanos y de los profesionales del sector para este modo de transporte de interés público que, en la actualidad, convive con distintos modelos e iniciativas públicas y privadas de movilidad.
El servicio de Taxi de Madrid cumple 100 años y, en la actualidad, cuenta con 15.776 licencias en el Área de Prestación Conjunta para un total de 56 municipios, entre los que se incluye la capital. Este sector ha sido esencial para hacer de Madrid una ciudad pionera en avances y progresos colectivos gracias a una renovación y modernización constantes para adaptarse a los cambios y las necesidades de los ciudadanos. Por ello, el Ayuntamiento considera que la modificación de la Ordenanza Reguladora del Taxi permitirá avanzar hacia la racionalización del servicio y su adaptación a las nuevas realidades tecnológicas y sociales ofreciendo soluciones a los problemas del presente anticipándose a la gestión del futuro.
Se recogen cuestiones sobre cómo debería regularse el servicio para ser más accesible, eficaz, eficiente y competitivo y será posible sugerir cualquier mejora
Cuestionario para los usuarios
Las modificaciones realizadas por la Comunidad de Madrid en el ‘Reglamento de los Servicios de Transporte Público Urbano en los Automóviles de Turismo’, a las que debe adaptarse la capital, han servido de impulso para realizar esta consulta pública a todos los ciudadanos que deseen realizar sus aportaciones. En ella, se preguntará por la frecuencia de uso del taxi; cómo debería regularse el servicio para ser más eficaz, eficiente y competitivo; o qué mejoras incorporarían para garantizar un servicio accesible, de calidad y sostenible en el tiempo a personas con movilidad reducida.
En este sentido, las preguntas ahondan en cuestiones como qué debería exigirse concretamente a los vehículos adaptados o cómo se mejoraría su calidad y seguridad. El cuestionario también incorpora una pregunta final abierta para que el receptor pueda añadir las aportaciones que considere sobre cualquier aspecto relacionado con el servicio del taxi.
Desde su aprobación en el Pleno municipal en 2012, la Ordenanza Reguladora del Taxi ha experimentado tres modificaciones con el objetivo de adaptar su contenido a los cambios sociales y tecnológicos. La primera reforma se realizó el 30 de julio de 2014; la segunda, en octubre de 2017 y, la tercera y última en junio de 2021.