El Museo del Prado acoge la exposición Herrera el Mozo y el Barroco total, dedicada a Francisco de Herrera el Mozo (Sevilla, 1627-Madrid, 1685), uno de los artistas más singulares e innovadores del barroco en España. La delegada de Cultura, Turismo y Deporte, Andrea Levy, ha asistido hoy a la presentación de esta muestra que permanecerá abierta hasta el 30 de julio y ha contado con una subvención municipal de 250.000 euros.
El Ayuntamiento de Madrid ha colaborado con una de las exposiciones señeras del Museo del Prado en 2023, sobre la que la delegada, Andrea Levy, ha destacado que “pone en valor el legado de Francisco Herrera el Mozo, que alcanzó su cumbre artística con sus pinturas al fresco y, particularmente, con la decoración de la cúpula de la basílica de Nuestra Señora de Atocha”, entre otras grandes obras que se pueden disfrutar actualmente en el Museo del Prado.
La muestra, que recupera la obra de Francisco de Herrera el Mozo restaurada casi en su totalidad por el Museo del Prado en una campaña sin precedentes, pone de manifiesto lo que supuso la estancia en Italia del artista e ilustra la influencia de su formación en Sevilla.
A pesar de ser considerado como uno de los artistas más singulares del barroco español y la trascendencia que tuvo en vida, Francisco de Herrera el Mozo continúa a día de hoy siendo un artista poco reivindicado y desconocido en muchos aspectos.
Con esta exposición se quiere poner de manifiesto su decisiva estancia
Con esta exposición se quiere poner de manifiesto su decisiva estancia en Italia donde destaca su formación como dibujante y como pintor de naturalezas muertas de peces, así como las relaciones que mantuvo con influyentes mecenas relacionados con la Academia de San Lucas y la de Virtuosi al Pantheon, que demuestran sus pretensiones y ambiciones artísticas.
Por otra parte, la muestra tiene como objetivo ilustrar la influencia de su formación en Sevilla junto a su padre, Francisco de Herrera el Viejo, como grabador, al igual que su relación con Bartolomé Esteban Murillo, contraponiendo sus maneras de entender la pintura y destacando que en vida fue muy envidiado por su talento y personalidad que no dejaron indiferente a nadie.
La exposición también pondrá de relieve su condición como uno de los más prolíficos y versátiles dibujantes del Siglo de Oro español que defendió la idea del artista total: diseñador de creaciones pictóricas en lienzo, fresco, grabado, retablos, arquitecturas, escenografías teatrales o tapices y responsable de ceremonias funerarias.